Con nuevo material a cuestas, Hermanos de Sangre festeja sus siete años nada menos que en La Trastienda el próximo sábado 20 de abril y la preparación para una noche tan especial arrancó desde hace varios meses. “Queremos mostrarle a la gente algo fresco, distinto”, explican entusiastas, y profundizan: “No solamente es variar el setlist y ensayarlo, sino que también tratamos de pensar una puesta en escena distinta, arreglos distintos, hacer de todo el show algo diferente a lo que hicimos anteriormente. Las semanas previas son agitadas, hay mucho laburo detrás de cada cosa que hacemos y no solo por parte de los músicos, sino de todas y todos los que laburan con nosotros para que cada show sea una experiencia nueva”.
―Desde la salida del último disco y la presentación en Niceto han realizado muchos shows, ¿cómo están viviendo este presente? ¿Hay tiempo para el disfrute?
―Estamos muy contentos por lo que estamos generando. Nos gusta lo que es hoy Hermanos de Sangre, nos gusta la energía que tenemos y transmitimos como banda, porque de alguna manera siempre encontramos un motivo para disfrutar de lo que sea que nos pase. A veces nos ponemos a pensar en el tiempo que llevamos como banda y la verdad es que, mirando hacia atrás, hemos hecho mucho más de lo que creemos. Eso en parte es porque siempre hubo disfrute, pero también cada uno aporta lo mejor de sí a un mismo proyecto. Estamos muy conectados con el presente que atravesamos en general también, por ende, es necesario hacerlo con nosotros mismos ya sea desde el trabajo o el disfrutar.
El último trabajo de la banda, homónimo, salió en noviembre de 2023 con siete canciones, y asumen que fue un trabajo muy vertiginoso y a la vez muy enriquecedor. “Todo lo que pasó entre este disco y nuestro EP anterior de 2022, fueron horas de sentarse y producir, tirar ideas, congeniar, ¡aunque a veces no tanto! En menos de cinco meses compusimos, grabamos, y lanzamos el disco. Para nosotros fue en tiempo récord, así que fue hermoso, por momentos cansador, pero en definitiva fue como tenía que ser. También nos sumó otra experiencia más a lo que ya conocíamos, con lo cual fue de un crecimiento enorme”.
―¿Qué sienten que mantiene su último disco de aquel debut en 2018 y que creen que tal vez hayan cambiado rotundamente?
―La esencia de la banda se mantiene en las canciones. El sonido por suerte cambio muchísimo para mejor y nos afilamos cada vez más. Claro está que nuestro amigo, hermano, y coproductor Diego Boquete también tiene muchísimo que ver con todo esto. Pero si escuchás el disco, sabés que es Hermanos de Sangre, no hay duda. También pasó que nos permitimos probar cosas nuevas en el último disco, así como sintetizar varias cuestiones que quizás en discos anteriores ahondábamos más. Pero sí sentimos que cambió rotundamente en actitud. Estamos más grandes, más maduros, ya no somos los pibes que se juntaban después del cole a hacer rock and roll. Y eso sin duda se nota en las canciones.
