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Dillom: Una muerte y un funeral

El cantante dio el último adiós a Post Mortem, su álbum debut, en un Movistar Arena repleto y con grandes invitados.

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La gira “Post mortem”, el disco con el que Dillom debutó el 1 de enero de 2022, y que no sólo fue aclamado por gran parte de la crítica especializada sino que además fue posicionado como uno de los mejores discos del año, llegó a su fin: murió. 

El show comenzó con luces blancas danzando sobre el escenario hasta que la oscuridad se apoderó del lugar por unos segundos. Una cruz de neón pendió sobre el mismo, entonces seis personas vestidas completamente de negro caminaron por la pasarela cargando un ataúd. La voz de Mario Pergolini en “Demian” se encargó de abrir el setlist que inició con el track que le da nombre al álbum, mientras el cantante salía de adentro del féretro.

“Pelotuda” y el ya conocido medley entre “Una vela” de Intoxicados y “Rili Rili” continuó fogoneando a la audiencia, que estaba preparada para dejarlo todo: desde una zapatilla hasta un documento que el propio Dillom encontró. 

El show siguió tomando color hacia una tétrica obra teatral, cargado de escenas góticas dignas de una historia de terror. Con una banda soporte bien rockera la noche se prestó para que el bardo fuera total: “Duo”, “Piso 13”, “Side”, “1312” ft Muerejoven y la flamante “Ola de suicidios” abrieron las rondas de pogo. “Latas” junto a K4 y Proyecto Gómez Casa, dieron paso a uno de los primeros highlights de la noche.

Una de las grandes e inesperadas sorpresas de la noche fue la cuchillada que cortó con las vibes punks que se estaban viendo, cuando Miranda apareció en escenario e interpretaron junto al joven artista “Dos”. Luego, fue el turno de “Coach” nuevamente con Muerejoven al comando, seguidas de un gran momento bailable con “Hegemonica” y “Organiko”.

Olee, ole, ole, olee, Diloom, Dilooom” coreaba la gente ya totalmente extasiada. Vamos con algo con algo más viejo, dijo el cantante y comenzó a sonar “Dudade”. A continuación, siguió “Bicicleta” anticipando el cierre de esta primera parte, que finalizó con el divertido skit de Bohemian Groove y el hit “Opa”.

El regreso fue junto a Fermín Ugarte y Luis Lamadrid, sus productores, y nada más ni nada menos que Andrés Calamaro para hacer “Output/Input”. Dejando así al público boquiabierto. Este funeral con tintes rockeros no pudo tener mejor invitado.

Llegó el turno de un par de hits con “La primera” y “Sauce”.  “No podemos creer que esté llegando al final esta época tan linda, que no quiere decir que no vengan épocas mejores. Le tenemos mucho cariño a este disco, a esta instancia de nuestra vida, y es gracias a ustedes. Gracias por comprar una entrada para el show, a pesar de cómo está la cosa. Espero que se lleven el mejor recuerdo de esta noche y que haya estado a la altura”, comentó Dillom. Así, pidió a sus fanáticos que encendieran los flashes de sus celulares para acompañarlo en “220”, apuntando al desenlace de la velada.

Sin embargo, y a pesar de que el público pensaba que era el final cuando se apagaron las luces, faltaba la última colaboración de la noche, fue entonces cuando Dillom entonó “Rocketpowers” junto a Saramalacara, seguida de  “Reality” y así adjudicarse uno de los pagos más enardecidos de la noche. Tras haber entonado “Amigos nuevos”, Dillom regresó al ataúd y fue transportado fuera del escenario por sus compañeros de Bohemian Groove, cerrando así un show, que más que un concierto fue un funeral, el final de Post Mortem. Sin embargo la fuerza de Dillom en la escena musical está más viva que nunca, así lo manifestaron los miles de fans mientras su artista favorito se retiraba en su féretro: “Dillom no se murioo, Dilom no se murioo, Dillom vive en pueblo la puta madre que te parioo”.

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Las fotografías que acompañan esta nota son gentileza de prensa y fueron tomadas por @irishsuarez, @analogic22b, @godymex, @isidrogamarra y @vickydragonetti

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