Rolando Sartorio construyó una destacada carrera musical con La Beriso” su banda de toda la vida. Aquellas canciones, varias de ellas escritas desde el dolor, fueron las que posicionaron a Rolo y su banda como una de las más convocantes. Así, llenó grandes escenarios como el del Estadio Único de La Plata en reiteradas ocasiones.
Sin embargo, Sartorio quería un tiempo y un espacio para hacer música como “Rolo”. Era el momento de largar un proyecto como solista. Entre shows y shows con La Beriso, en septiembre sacó 1973, el primer disco bajo su propio nombre. Y para cerrar el año, el oriundo de Avellaneda decidió armar su festejo en La Trastienda.
Aún siendo Rolo solista, el público que se congregó en Monserrat permitía sentir que era otra noche de reunión de la familia Berisera. Algunos trapos estuvieron colgados en los balcones dentro del bar. El público era de edades varias, la gran mayoría siendo +40, y varios incluso +50. Una mujer, de edad tal vez aún mayor, dijo presente con cánulas nasales. Todos querían acompañar a Rolo en esta etapa.
Pasadas las 21, se abrió el telón del escenario, pero fue un amague: La Trastienda aprovechó este espacio para promocionar sus eventos del verano y luego se cerró. A las 21:25 aproximadamente, el telón se volvió a abrir y se largó el rock: a Rolo lo acompañaron Miguel García en guitarras eléctricas, Fer Cosenza en guitarras y cuerdas, Roberto Seitz en el bajo, Diego Serrano en teclas y Javier Pandolfi, también de La Beriso, en batería.
Como show presentación de 1973, las canciones del disco fueron gran parte del evento. Los primeros temas de la noche fueron “Ya no sé”, “Momentos” y “Fantasmas”. Rolo hizo mención honorífica a un público que no solo se aprendió la letra de cada tema y la cantó con el alma, sino que también vibró, saltó y pogueó toda la noche.
“¡Te amo!” le gritó una fanática, a lo que Rolo le respondió “yo también”, para desatar aún más el fervor. La noche siguió con más temas del flamante disco de Sartorio, entre ellos “Verónica” y “El arrepentido”. Rolo también aprovechó para agradecer a la gente por acompañarlo en esto que, para él, es “un recreo”, y afirmó: “hace 25 años que toco con la banda de mi vida, que es ‘La Beriso’, y voy a seguir tocando con ‘La Beriso’”.
Para complementar la fiesta de rock y la lista de temas, la banda se la jugó con un cover: “Have You Ever Seen The Rain?” de Creedence Clearwater Revival. Después, no podían faltar temas de La Beriso y tocaron “Creyendo”, del último disco Mienten, en una versión más suave y lenta.
Interludio: los músicos dejaron el escenario, excepto Javi Gandolfi, que se mandó un solo de batería jugando con el público. Terminado el acto, Rolo volvió a escena, pero invitó a unos amigos suyos a tocar: Emi Mansilla y Yamil López en guitarras, Nati Castelli en coros, Pablo Pastori en teclas, Pablo Puntoriero en saxo y Ezequiel Bolli en el bajo. Hubo un mini show de La Beriso en La Trastienda.
“Mano a mano” abrió el segmento 100% berisero de la noche, con el público ya en un alto nivel de éxtasis. “Tres mujeres y ella”, aquel tema que la banda sacó con Andrés Calamaro, le siguió en la lista, que fue redondeada con “Ella”, canción que habla de la violencia de género y resignificada con la consigna del “Ni una menos”, y el infaltable “Traicionero”, con Rolo dejando el canto del final a Nati.
Rolo mostraba trapos de la gente y los colgaba por un rato en el soporte del micrófono, mientras los músicos de su grupo regresaban para el tramo final con los temas restantes del disco. Alguien a un costado pidió dos veces por “Perdido en Buenos Aires”, con una mujer a mi lado haciendo cara de “¡qué pesada!”. Pero antes, el grupo salió con temas como “Dios te bendiga”, “Saltar” y “Sin saber por qué”. Para cerrar y despidiéndose de la gente, le dio el gusto a la fanática: “Perdido en Buenos Aires”.
Entre himnos beriseros consagrados y canciones nuevas de otra etapa naciente, Rolo Sartorio tuvo su festejo de fin de año con su fiel público presente. Sin dejar de lado a la banda de su vida, pudo tomarse un momento para ser él mismo. Fiel a sus formas, a su propio rock. Después de este recreo, preparará el 2026 de La Beriso. Pero la noche de La Trastienda mostró que, sea con la banda o como solista, Rolo tiene una familia que lo va a seguir en todas.