Loserville en Parque Sarmiento: Metal en todas sus variantes

El festival Loserville aterrizó en Argentina el pasado martes 16 de diciembre en Parque Sarmiento y desde las cinco de la tarde sonaron infinidad de artistas internacionales.

El grupo dio la apertura del evento fue Slay Squad con un breve show de Ghetto Metal, género por el que ellos mismos se definen. Finalizado su show, los músicos hicieron notar su presencia durante todo el evento, paseando entre el público y también volviendo al escenario junto a Ecca Vandal y Limp Bizkit.

Riff Raff siguió adelante con el Loserville. Solo en el escenario acompañado de su música brindó un breve espectáculo de Hip Hop mientras el sol aún seguía brillando. 

Uno de los momentos más esperados sin dudas fue el debut de Ecca Vandal en Argentina. La artista sudafricana se presentó junto al baterista Dan Maio y el guitarrista Luke Webb y brindaron un show que mezcló hip hop, rock, metal y música electrónica. Como comentamos antes, durante su presentación los miembros de Slay Squad volvieron a subir al escenario, pero de golpe había una persona con una media en la cabeza y anteojos presente. Nadie sabía de quién se trataba, pero los tatuajes en las piernas se podían ver, más adelante se revelará su identidad. 

Aún no anochecía en la ciudad y 311 salió al escenario. El grupo de Nick Hexum realizó un set list donde se incluyó un solo de batería de Chad Sexton, que luego se convertiría en un ensamble de percusión junto a los demás miembros del grupo. 

Habiendo bajado el sol apareció Bullet For My Valentine, el grupo estaba celebrando los 20 años de The Poison, su disco debut el cual lo tocaron de punta a punta. En palabras de Matt Tuck, estaba muy contento ya que se encontraban tocando ante más de 30.000 espectadores. También aprovecho para mencionar su primer vínculo con la banda cabecera del festival: “Cuando tenía 16 años fuimos con mis amigos a un show de Korn, y vimos a una banda tocar antes de ellos que fue increíble y esa banda es Limp Bizkit“. El grupo finalizó su show con “Waking The Demon”, esa canción que expresa claramente que cuando la paciencia se agota, a veces despierta el demonio interior. 

Sam Rivers legend, Rest in peace, Our brother forever fue el mensaje inicial que dieron las pantallas acompañado por un video donde recordaron momentos íntimos sobre el fallecido bajista semanas antes. Durante la proyección del mismo, el grupo Limp Bizkit ya había salido al escenario pero sentados en silla de espaldas al público mirando junto a ellos el pequeño homenaje. “Breaking Stuff” se ocupó de secar las lágrimas, hacer saltar, corear a todos aquellos que venían esperando ese momento desde el inicio del festival. Recuerdan aquella persona con una media de red en la cara durante el show de Ecca Vandal, era ni más ni menos que Fred Durst. Fue una catarata de hits: “My Generation”, “Rollin”, “My Way”, todos sin esperas. Pudimos apreciar fragmentos de Metallica, White Stripes y Creedence. La versión acústica del grupo The Who “Behind Blue Eyes” también estuvo en el setlist. “Sabotage” de Beastie Boys, que esta oportunidad invitaron a Ecca Vandal a interpretarla. Si “Break Stuff” es bueno para abrir un show, también lo es para cerrar. Pero en esta oportunidad junto a los muchachos de Slay Squad.

No hay palabras que describan el pedazo de show que se mandó Limp Bizkit. La energía que manejan y el vínculo con su público hicieron una vez más una velada para el recuerdo.