Las Pastillas del Abuelo en Ferro: Una fiesta de rocanrol

A pesar de cursar el otoño, en Buenos Aires reinaba un clima templado y húmedo, con algunas nubes que parecían amenazar la noche. Y el calor humano se incrementaba a medida que el público llenaba el campo del Estadio Arquitecto Ricardo Etcheverri, incluso previo al inicio del show, donde ya había tres personas que se desmayaron antes de tiempo y precisaron atención médica. 

Todo estaba dado para vivir el mejor recital de Las Pastillas del Abuelo. Y la cantidad de espectadores lo marcó: 35 mil presentes, con localidades agotadas, superando el récord de los 25 mil asistentes del año 2016 en el mismo estadio. Lo que quedaba era que salieran los músicos e hicieran su parte para terminar de encender el rocanrol. Y así fue: apareció la banda, con el Piti luciendo un “LPDA” marcado en su cabellera, y se largó el primer pogo del público, al ritmo de “José”, la primera canción.

La velada continuó con un repertorio que el público cantó y saltó todo, entre el calor, la humedad y las banderas que se agitaron. “Locura y Realidad”, “Amar y envejecer” y “Fuerza, Locura y Libertad” fueron algunas de las canciones que integraron este tramo. El tema 10 fue, ni más ni menos, “¿Qué es Dios?”, la canción homenaje a Diego Armando Maradona, con Gianinna presente en la popular, siendo el primer momento emotivo de la jornada que culminó con un canto al Diego y “el que no salta es un inglés” entre la gente.

La tónica predominante de la fiesta continuó con un segundo tramo que incluyó canciones como “Desde la postura”, “Inercia”, “¿Quién sabe?” y “Sabina y Piazzolla”. En la conclusión de esta parte, apareció el primer invitado de la noche: Emanuel Noir, de Ke Personajes, se hizo presente para cantar uno de los hits de las Pastillas que tuvo su reciente reversión junto al cantante de cumbia: “Loco por volverla a ver”, con un público exultante. “Aguante el rock y la cumbia”, cerró Ema, que agradeció al Piti por dejarlo “ser parte del rock”.

Para el tramo final, el jolgorio siguió con el segundo invitado: Benjamín Amadeo cantó junto al Piti “El favor”. “Este se canta todo”, dijo Fernández al despedir a Benja del escenario. “Rocanrol N’N’N’”, “Tantas escaleras”, “Osiris”, “¿Qué hago yo esperando un puto As?” y “Ojos de Dragón” fueron parte del segmento de cierre, para terminar el show con “Otra vuelta de tuerca”, dejando al público cantar (y bramar), en agradecimiento, “que se hayan inventado las ‘Pastillas del Abuelo’”. Por supuesto, “La 20” explotó.

Así terminó la gran noche en Ferro, con un Piti Fernández visiblemente emocionado y un poquito pasado por la bebida, al punto que había olvidado si los músicos saludaron al público en el intervalo y dejó cantar a los 35 mil presentes varias partes de los últimos temas. “¡Esto es una fiesta, la puta madre que lo parió!”, fue el canto con el que el público despidió a la banda. El mejor recital de la historia de las Pastillas fue una verdadera fiesta de rocanrol.

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