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Lo Que Nos Cuentan: “Hubo momentos en que tuvimos pánico de no llegar o no gustar”

La banda porteña habló con El Bondi sobre su último lanzamiento: y el show que se viene.

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Enfocados en un sonido que coquetea con distintas estéticas sonoras como el rock, pop, indie y funk, Lo Que Nos Cuentan estrenó a mediados de abril su más reciente obra musical, Pánico, Locura y Amor.

– ¿Cómo vivieron el proceso creativo de este disco?
– Con mucho pánico, locura y amor. Ah, re (risas) No, pero posta, creemos que siempre hay un poco de todo eso en un proceso creativo. Este es nuestro segundo disco y el primero en ser trabajado con un productor. En los momentos de producción y composición estás en una donde querés tocar, maquetar, producir y grabar, y por otros momentos sos un mar de nervios y un estallo de estrés. Sacar un disco implica muchas cosas, no solo tocar un instrumento. Hay que pensar una tapa, un nombre, un orden, clips etc. y al ser esta una banda auto autogestionada, nos tuvimos que hacer cargo de muchas de esas cosas. También es cierto que somos muy estrictos con nosotros mismos y tratamos de ponernos plazos y cumplir con objetivos. Por eso creo que en este disco hubo momentos en que tuvimos pánico de no llegar o no gustar, locura por la intensidad con la que se transita un camino así y amor por lo que se hace.

– Eligieron “Pánico, Locura y Amor” y “Luz Vulgar” como las primeras canciones para hacer conocer el disco, ¿por qué esa elección?
– Creemos que PLYA representa bastante a la banda y plantea el quilombo mismo de la existencia de una forma muy minimalista. Tiene algo de pop, indie y rock, que es un poco la búsqueda de este proyecto musical y un mensaje claro en donde seguramente más de uno se puede haber llegado a sentir representado. El estribillo es un grito de “no me rompan las pelotas” y “quiero dejar de pensar y auto romperme a mi mismo las bolas” todo al mismo tiempo.

“Creímos que eso podía hacerse eco en quien lo escuchara, ya que nadie puede escapar a la única verdad de la vida y es que ser libre tiene un precio. En el video clip hay un poco más de esa información, digo, del discurso del tema.”

Por otro lado “Luz Vulgar” sin llegar a ser una pieza super compleja es más elegante y sofisticada; la banda también tiene esa búsqueda. Ese tema es un funky que habla de algunas cosas que pasan a la espalda de lo que pasa de día, o de lo que es “socialmente aceptado”, y un poco el video lo muestra. Esos dos temas son dos polos que, sin llegar a ser opuestos, son diferentes y creemos que dan un panorama general de lo que es la banda.

-¿Cómo fue trabajar con Francisco Nicholson? ¿Sabían que querían trabajar con él?
-Fran es un copado la verdad. Trabajamos de una forma que nosotros llamaríamos nueva. Nos vino a ver a la sala de ensayo y de ahí fuimos armando maqueta tras maqueta con idas y vueltas de opiniones hasta que quedó la maqueta definitiva de cada tema y nos metimos a grabar. No es que lo hayamos buscado a él particularmente, pero cuando contactamos con NAK (que es el lugar donde grabamos) y nos enteramos quién era y de dónde venía y dijimos de una, es por acá. Teníamos referencias de los proyectos musicales en los que él se había desenvuelto y sabíamos que, si bien no teníamos mucho en común a nivel artístico, sí nos entusiasmó saber que era una persona dedicada a esto, con conocimiento y que nos podía aportar una mirada súper actual; se nota mucho la mano de él en algunos temas.

-Coquetean con muchos géneros, como el rock, pop, indie y funk, ¿Qué es lo que les atrae de todos ellos?
-Ufff. Que pregunta. Pasa algo muy loco que es como que hay un hilo que une a todos esos géneros. O sea, lo que queremos decir es: tampoco es que el disco tiene temas de tango, hard rock, cumbia y electro pop. Es como que esos cuatro géneros, con los que jugamos, tienen algo en común. Como una especie de sensación. Sentimos que cada cosa nos lleva a otra cosa como de forma natural y dejamos que fluya. Todo esto no quita que en el futuro vayamos a probar otras cosas pero la verdad es que nos re pasa que en la sala cae alguien con un yeite y si gusta, no nos privamos de ello. Lo que sí tratamos, es de mantener más o menos una línea.

Las influencias vienen de todos lados, tenes a gente dentro de la banda que se formó o creció con grunge, otra que está más en la línea del punk o de Blondie, por ejemplo. Luego estamos algunos que somos más clásicos de Pink Floyd y Los Beatles, pero hasta hemos tocado covers de Oasis, y todo esto sin dejar lo nacional que nos encanta: Charly, Fito…¡hasta Los Redondos!

– Hablemos del arte de tapa, ¿cómo se les ocurrió? Los emojis no tienen rostro/identidad, es algo que me llamó la atención.
-La tapa del disco fue un boceto hecho en un momento de inspiración y de ahí lo fuimos trabajando. No sabemos porqué, pero ya en esa primera idea pinto hacerlos sin rostros y en los sucesivos trabajos que fuimos haciendo sobre ese boceto, siempre se mantuvo esa idea. Hay algo místico y de despersonificación que nos gustó. Cuando pones una cara, pones un gesto y eso dice mucho. Para que nos conozcan, es mejor que escuchen el disco, JAJAJA (RISAS). La idea fue un poco ese minimalismo lindo, así como suena, poco, sencillo pero ameno y agradable. Es como que nos encariñamos con las figuras.

-Van a presentar este disco en vivo. ¿cuándo? ¿donde?
-Vamos a presentarlo en Makena el sábado 6/5, con Natural, una banda que va a abrir la fecha y luego nosotros estaremos presentando “Pánico, Locura y Amor”. Además van a haber algunas sorpresitas y mucha, pero mucha onda y alegría.

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