Vicky Soulé: “Mí álbum es la declaración de ‘esta soy yo’”

El apellido no es uno cualquiera, carga ni más ni menos que el de uno de los pioneros del rock nacional como lo es Ricardo Soulé, creador de la legendaria banda Vox Dei. Es inevitable la pregunta de cómo fue crecer con un pedazo de historia del rock al lado. 

“La música fue algo muy natural siempre, era un miembro más de la familia. Yo no tomaba dimensión de la importancia de la trayectoria de mi papá hasta que crecí y ya tenía mis propias ambiciones musicales. Sin duda todo ese contacto, esa convivencia con la música la volvió indispensable en mi vida e hizo que la amara desde siempre.  Con el tiempo voy entendiendo lo fuerte que es la marca y el legado de la música de mi papá y me llena de orgullo. Creo que poder crecer viendo a los grandes desde cerca fue un privilegio, estoy muy agradecida por todo lo que me enseñó”, afirma Vicky y responde ante la pregunta de si en algún momento la vida la llevó a dedicarse a otro rumbo: “Nunca pensé en nada que no fuese la música. Para mi estaba claro que iba a ser mi camino. Pero durante los años hubo momentos de dudas y cuestionamientos, replantearme el rumbo. Supongo que a todos nos pasa cuando le metemos tanto a nuestros proyectos. Sin embargo siempre gana el fuego que llevo adentro por hacer música, mi música”. 

Ahora está en plena presentación de su disco Suerte! en el que plasma toda su impronta.

–¿Cómo fue la creación de este álbum? ¿Con qué se van a encontrar los oyentes cuando pongan play?
-Suerte! fue desde el inicio un disco con un concepto muy claro. Quería hacer un disco de rock, con todos sus matices. Bien rock. Es un álbum con una energía que arrasa, tiene canciones viajeras ruteras, temas que te mueven y te transmiten buena vibra.

Se van a encontrar con un álbum de 14 canciones que plasma el momento creativo y artístico en el que me encuentro, con mucho optimismo y ganas de hacer. Me encuentro más segura, bien plantada en mi lugar de mujer del rock y mi álbum es la declaración de “esta soy yo” 

–¿Por qué decidiste grabar el video de la canción “Turistas” en Nueva York? 
-Nueva York me encontró en todo un momento de resurgimiento, con el disco ya comenzado y muchas ganas de renovar mi sonido y mi imagen. Me inspiró y me hizo sentir que todo es posible. Cuando la vi no tuve dudas que era la imagen de Turistas, además una ciudad que encaja muy bien con la metáfora del turismo que dice en la letra, aunque no habla del turismo convencional sino del amor pasajero. Me pareció una ciudad perfecta para darle toda esa belleza, esa bohemia y el valor agregado de ser una cuna de rock y arte mundial. 

–¿Qué nos podés contar de tus próximos shows?
-Mis shows son la experiencia latente de mi música. Creo que hay algo de la música en vivo que solo se puede dar en directo con el público presente. Me encanta esa magia que se produce, ese intercambio de energía, esa adrenalina de poder ver los rostros de las personas abriendo el corazón a mis canciones. Mi show es un viaje por mis canciones, por mis melodías, la poesía de mis letras, un momento especial en el que invito a la gente a entrar en mi universo, con mucha energía, movimiento, puesta en escena. Me gusta que la gente se vaya cautivada con un show de rock en vivo que tiene entretenimiento de principio a fin.

–Recorriendo un poco tu trayectoria, nos encontramos que estuviste en una banda hasta que pasaste a tu faceta solista. ¿Por qué tomaste esta decisión? 
-La banda fue el mejor de los comienzos, ese que te hace sentir parte de algo, compartir sueños, ganas. Pero en cierto punto lo mío empezó a encarar muy serio, quería profesionalizarme, y el ritmo que quería llevar no lo podía lograr con la banda. Fue la mejor decisión porque también significó llevar más responsabilidades y un gran crecimiento personal y artístico para tomar todas las decisiones. 

-¿Cómo ves la escena de la música actualmente? 
-La música está en constante evolución, como la sociedad. Hay musicas nuevas de moda que no me representan, pero yo no sigo las modas. Al mismo tiempo, creo que las cosas buenas no pasan de moda, porque no son una moda, sino un mensaje, una actitud. El rock es atemporal y sigue en pie. Pero a los rockeros nos está siendo difícil encontrar espacios para desarrollarnos y llegar a nuestro público.