Don Lunfardo, independencia hasta la médula

A casi un año de su última presentación en la ciudad balnearia, Don Lunfardo y el Señor Otario vuelve a Mar del Plata con la promesa de que habrá rock and roll arriba del escenario y de que nada maldra sal. Denominado “Todo por seguir tus pasos”, el show repasará la extensa historia de la banda platense, que además interpretará cinco canciones de su siguiente álbum de estudio ("Tan gil como el destino", "Bocha de cristal", "Yazco", "Coto de caza", y "Las bestias"), el cuarto en su discografía.

El sucesor de Paracaidistas en franco retroceso (2008), anticipa Luciano “Chino” Angeleri (voz), está en su última etapa. “Lo queremos sacar ya”, expresa sobre el LP que está coproduciendo Martín Carrizo y reconoce que falta tan poco que tienen pensado presentarlo en alguna de sus próximas fechas: 10 de marzo, en San Justo, o el 7 de abril, en Rosario. Sin embargo, el cantante admite que ni bien tengan definido lo que es el sonido, lo colgarán en la web, como acostumbran hacer con sus álbumes.

Comparado con Paracaidistas…, que tiene un sonido más industrial, lo nuevo, analiza Angeleri, es más rockero, como se puede escuchar en “Bocha de cristal”, por ejemplo. Pero esto no quita que también incluya texturas ligadas al tanto al blues como, por qué no, al folklore. “Es ecléctico, como todos los discos de DLSO, pero hay más tracción a sangre: todo lo que suena está tocado, no hay secuencias ni programaciones”, reflexiona el músico. Entre trabajo y trabajo, asume, buscan generar cambios profundos y que no se parezcan entre sí.

A diferencia de años anteriores, 2017 fue bastante fructífero para la banda en cuanto a presentaciones. “Habíamos decidido no tocar, para dedicarnos a grabar”, cuenta Angeleri, pero como la situación se dilataba por diversos motivos, optaron por salir, armar shows y rodar por el país. Casualmente, la Gira detrás de la autopista terminará donde comenzó, en La Feliz, e incluyó fechas, además, en Escobar, Córdoba, San Justo y Pompeya. Por eso, lo del sábado será una despedida y una bienvenida a un ciclo nuevo, donde se repartirán una nueva gacetilla, clásico souvenir de los recitales lunfardos. Así que, los primeros 500 que lleguen a Abbey Road, “que se pongan pillos, porque van a estar zarpadas”.  

-Entre Paracaidistas… y el disco que están por dar a conocer, pasaron alrededor de diez años. ¿Lamentás no haber publicado más en estas casi dos décadas que llevan tocando?

-Sí, en parte, pero fue un proceso, donde la banda evolucionó, pasó a otro plano, sosteniendo los códigos y los dogmas que tenemos. También tocamos bastante, para aceitar la formación (NdlR: Desde 2012 mantienen los mismos integrantes), para que el público la sienta como su suya, porque no nos hacemos los boludos ni miramos para otro lado. Necesitamos que la banda tenga ese rol, conocernos, hermanarnos, para así poder sacar el disco. Y si bien me hubiera gustado sacar más, hicimos un montón de canciones, tenemos como 40 inéditas, que se irán filtrando con el tiempo.  

-Además, el disco lo realizaron en su propio estudio, toda una novedad para el grupo.

-Es un sueño que queríamos cumplir hace tiempo, la independencia hasta la medula. En tiempo donde todos transan, donde todo es chuku (sic), para nosotros es muy importante haber logrado eso.