Iván Noble: "Ya escribí mis mejores canciones"

El pasado martes, el cantante Iván Noble presentó su primer libro, "Cómo el cangrejo: Bitácora emocional de gira", en el barrio de Palermo. Junto a novel autor se encontraron el editor de su material, Gonzalo Garcés, y el periodista y crítico Maximiliano Tomas, quienes oficiaron como moderadores del encuentro.

A lo largo de la charla, los presentadores del evento repasaron junto a Noble algunos de los pasajes del libro y destacaron la audacia y crudeza con la que el ex cantante de Los Caballeros de La Quema abordó varios de los cuentos que escribió. "Es un tipo que se anima a hacer un balance de su vida cerca de los 50 años, y en él se acuerda de sus amigos, de su familia, de sus abuelos y de sus compañeros de ruta, pero de una manera bastante descarnada", afirmó Tomas.

El músico explicó que todo esto se trató de un desafío que lo entusiasmó demasiado desde el principio y aseguró que la escritura era un universo que no manejaba con total naturalidad. "Hace 25 años que hago canciones. Si me encerrás en una habitación y me decís que no voy a salir hasta que no tenga una escrita, a los 20 minutos seguro que salgo con una hecha; en cambio, la literatura es algo a lo que le tengo mucho respeto", confesó ante un público que contaba entre sus filas con los músicos Leo García y Fabián "Zorrito" Quintiero.       

Respecto a sobre cuán personales son estos textos, el cantante sostuvo que se trata de algo "muy confesional" y que su madre, sus amigos y varios de sus afectos más íntimos le remarcaron este aspecto, algo que consideró un elogio, debido a que muchos de los autores que lo conmueven poseen esta característica literaria.    

Entre las confesiones más curiosas de la noche estuvo una en la que, el ahora escritor, dijo que sus mejores trovas "ya fueron escritas". "No sé si fueron grandes canciones, pero creo que a lo mejor de mi repertorio ya lo hice", soltó sin ningún tipo de pena ni nostalgia; además, agregó que su relación con la música se trató de algo que él bautizó como "un sueño no soñado".

Sobre el cierre del evento, y ante la consulta sobre si fue o no catártico realizar esta obra, Noble reveló:  "El libro es sanador desde el punto de vista de que uno se saca de encima algunas ‘pestes’. Probablemente, una de las funciones de la literatura sea esa, sacarte de encima cosas que te pesan. Pero si entramos en ese terreno, me daría un poco de pánico terminar al lado de los libros de autoayuda. Tal vez, escribí esto para no quemarle más la cabeza a mis amigos en las sobremesas” (risas).