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Nacho Rodríguez

Nacho Rodríguez: "No sé cómo escribir un hit"

Cronista: Lucas González | Fotos: Luciano Bassano

10 de Octubre, 2017

Nacho Rodríguez: "No sé cómo escribir un hit"

El autor de “Mambeado” publicó un nuevo disco, donde destruye las etiquetas establecidas.

Por lo que logró hasta el momento, se considera a sí mismo como un artista desconocido, en desarrollo y poco condicionado. No importa que haya tocado en el Luna Park y publicado más de diez discos con cuatro grupos diferentes en tan solo 15 años. Para Nacho Rodríguez, cada uno de esos pasos son experiencias, un término que utilizará más de una vez en esta conversación, que cruzará varias referencias, desde Jackson Pollock a Rainer Maria Rilke, pasando por Picasso y La Destrucción total (2017), su último trabajo de estudio. “Me incentiva hacer algo nuevo”, confiesa una de las voces de Onda Vaga. “Sigo aprendiendo, probando sonoridades. Soy muy curioso con la música y me gusta mucho la canción, que termina siendo un vehículo de emociones y mensajes”.

Esa misma inquietud fue la que lo llevó a reformular una de sus bandas parelelas, Nacho y Los Caracoles, y a publicar su flamante álbum bajo el paraguas de una nueva y hasta entonces inédita identidad, solo como Nacho Rodríguez. Conformado por Rodríguez en guitarra, Jano Seitun en contrabajo y Faca flores en percusión, el proyecto nació de manera acústica, pero ahora mutó y sumó a Ezequiel Borra en guitarra eléctrica, Manuel Toyos en teclado y Juanfa Suárez en trompeta. “Me dieron ganas de cambiar, de salir de lo acústico”, explica y sostiene que Los Caracoles fueron un momento, y que ahora pasó a otro diferente. “El disco viene a contar un montón de cosas que me estaban pasando, como si fuera un resumen de mi musicalidad”.

-Por primera vez en tu carrera, salís a la cancha con tu nombre bien al frente. ¿Por qué ahora sí y antes no?

-Ahora lo sentí natural. Por ahí, en otro momento, tenía pudor. Pero es uno más de los personajes de los que interpreto, como el que hago en Onda Vaga. Si en algún punto entiendo que me está coartando, me pondré otro nombre. O seguiré como Nacho Rodríguez.

 

La destrucción de todo lo inútil

El reciente álbum fue realizado entre los intervalos de Onda Vaga, grupo que marca la agenda de Rodríguez. De hecho, esta entrevista se dio en la previa de una nueva gira del quinteto por Brasil. “Más que una dualidad, es una unidad. Me acostumbré a trabajar así”, dice. La presentación del material se hará a su vuelta. “Cuanto más te compartís, mejor”, considera.  

Lejos de la especulación apocalíptica, el concepto del disco es más terrenal/sentimental, y fue explicado en la Fan Page del músico: “Busca una destrucción total, una radical y amorosa, donde uno es acompañado a abandonar sus barreras, todo lo innecesario, lo que nos separa”. Es ahí, donde el cantante se planta y admite que “cuando se caen todas las etiquetas, te podés encontrar realmente con otra persona”.

Pero da un paso más al ampliar el pensamiento sobre los preconceptos, al reconocer que “si vos creés en algo, lo creás”. Entonces, ¿qué resta luego de la destrucción total? “Algo que no se puede decir con palabras”, responde, “una experiencia”. Y agrega: “Por eso la tapa, con un personaje como relajado (NdlR: es una imagen de él). Me divertía jugar con esa idea. La destrucción de todo lo inútil, lo que estuvimos creando en este tiempo”.

Más allá del sonido, el nuevo LP de Rodríguez guarda una estrecha relación con sus anteriores obras, incluyendo lo publicado con Doris y Alvy, Nacho y Rubin interpretan a Los Campos Magnéticos. La sensibilidad, por sobre todo, y la capacidad de hacer canción casi cualquier cosa, como en “Me perdí”, donde el cartel de un gato extraviado sirvió de inspiración. “Me gusta mucho trabajar a partir de letras ya hechas”, espeta y refuerza el planteo con "Tao", que está basada un capítulo del Tao Te King, un texto clásico chino. “Justamente, el Tao Te king habla sobre la destrucción total. Es un libro que puede resultar incomprensible o no, que empieza diciendo: ‘El Tao que puede ser escrito con palabras no es un Tao verdadero’”.


Casi famoso

No me imaginé siendo tan prolífico”, suelta al ser consultado sobre su capacidad de producción, pero asume que en más de una ocasión se quedó en blanco, no pudiendo escribir, contra todos los pronósticos. “No estoy componiendo todo el tiempo, aunque es algo que me gustaría hacer”, asegura y afirma que, a diferencia de Picasso, a él la inspiración no lo suele encontrar trabajando. En realidad, arriesga: “Tendría que componer más. Por ahí soy muy exigente”.

-Al margen de la exigencia, ¿hay un condicionamiento por lo que venís logrando?

-No, tampoco siento que esté en un lugar en el que tenga que demostrar algo. Mi ideal pasa por hacer lo que se me cante, ser libre y genuino, no quedarme atado a una fórmula, por más que haya resultado. Como pasa en Cartas a un joven poeta, el libro de Rainer Maria Rilke, donde un poeta novel le pregunta a Rilke, que también es poeta, si valía la pena lo que estaba escribiendo, a lo que le responde: “Eso sólo lo vas a saber vos. Si tenías la necesidad de sacarte eso de adentro y es tu verdad, no te va a importar la opinión de nadie. Te vas a dar cuenta, tal vez, que tu verdad es común”.

-¿Pero te gusta no ser un artista conocido, habiendo conseguido todo lo que conseguiste? ¿O te gustaría ser un poco más reconocido?

-No, está todo bien con eso, no tengo un problema. Porque sólo siento que soy un canal de creación.

-¿A qué te referís?

-A que te haces un poquito al lado, para que eso que está ahí fluya. Después uno dice "mi canción", como me pasó con "Mambeado" (NdlR: incluída en Fuerte y Caliente, disco que Onda Vaga publicó en 2008). Mucha gente se acercó a decirme que se sentía muy identificado con el tema. Al final somos uno, lo que te demuestra que te creés muy especial, pero en realidad no, y eso es lindo. ¡Por suerte!

-Mencionas la identificación, en “La bronca”, por ejemplo, hablás en una primer persona muy expuesta, cuando cantas “ya lo ves, no soy tan bueno como vos quereé, ni soy tan bueno como yo querría”.

-Tampoco tengo tan en claro cómo funciona. Viene una sensación y compongo a partir de eso.

-Otra vez reaparece el concepto de “canal”.

-Claro, totalmente. Está bien explicado en película Ex Machina (Alex Garland, 2015), cuando los protagonistas se paran delante de un cuadro de Jackson Pollock, que pintaba con manchas, y uno de ellos dice: “Si se ponía a pensar detenidamente cómo quería hacer las manchas, no hubiera hecho ninguna". En algún punto es así, si te ponés a juzgar mucho lo que estás haciendo, la canción no sale. Tenes que jugar, porque aparece. Es una experiencia: hay una canción que quiere salir, correte. Cuanto más te corrés, más fuerza tendrá. Cuando estaba haciendo "Mambeado", tenía en la cabeza: "Sentate y escribila". Y yo no quería. Es muy loco, porque había algo y yo me negaba.

-Citaste “Mambeado”, una canción que impulsó parte de la carrera de Onda Vaga, y que trascendió. ¿Qué significa hacer un hit?

-En algún punto, la canción tiene vida propia. Se siente lindo cuando alguien te dice que lo ayudó. Hay algo del ego que se siente bien, pero... (silencio). Cuando menos mía la siento, más me libero. Porque está esa cosas de querer volver a hacer, y volvemos a lo anterior: no sé cómo escribir un hit.

El rock (también) es compromiso

Para cuando se llevó a cabo la nota, se cumplían dos meses de la desaparición de Santiago Maldonado, un tema del que el rock se hizo eco con diferentes manifestaciones. En el caso de Onda Vaga, además de participar de un acto en Plaza de Mayo, el grupo publicó en su cuenta de Facebook una imagen en la que pedía la aparición con vida del joven, posteo que le valió más de una crítica por parte de sus followers.

Para Rodríguez: “Lo que pasa que ahora hay mucha bronca y todo es ‘o sos de un lado o del otro’. Y esto trasciende ese tipo de discusiones, es una desaparición. Como el ‘Nunca más‘, no puede volver a pasar. Cuando tocamos en el acto con Onda Vaga, Marce (Blanco), dijo: ‘Nosotros estamos acá porque queremos que aparezca Santiago’. Me pareció importante, porque venimos de una historia bastante pesada”.


*Jueves 12 en Santos 4040, Santos Dumont. A las 21.

*Jueves 19 en Café Vinilo, Gorriti 3680. A las 19.

*Sábado 28 en C‘est La Vie, Calle n° 55 1143 entre 17 y 18 (La Plata). A las 21. 

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