Mutar para no aburrirse

Muta (2017) es el tercer álbum de estudio de Morbo y Mambo, la banda que nació en Mar del Plata pero que ya mudó su base de operaciones a Capital Federal. En cuestión de horas será la presentación oficial ante un Niceto Club que ya los ha visto colmar su capacidad. Hablamos con Manu Aguilar, bajista, sobre el grupo, el nuevo disco y la música en general.

-Este trabajo tiene un sonido diferente, como ocurrió con los anteriores, Boa (2014) y Morbo Mambo (2011). ¿Es intencional o se da por la evolución?

-Es una consecuencia, ya que todos vamos conociendo músicas diferentes, y también cambia la manera en la que las escuchamos. De lo contrario, nos aburriríamos a nosotros mismos, primero que nada.

-¿Se prepara distinta la presentación del disco cuando ya lleva un tiempo publicado?

-Hay una realidad de esta época, y es que cualquier estímulo dura muy poco, las cosas buenas y las malas pasan desapercibidas en el caudal de información. En ese panorama, sacar un disco a veces se siente como tirar una miguita en una trituradora de papel. Por suerte, hay gente muy ávida por escuchar más de nuestra música, así que estamos muy contentos con el recibimiento que tuvimos. Hablando de la presentación, hemos retocado el setlist en pos de un show gradual pero efectivo desde el primer momento.

-En Muta incorporaron cantantes invitados por primera vez. ¿Cómo fue la experiencia de dejar de ser una banda instrumental por un rato?

-Nos gusta ir probando paletas nuevas, y para este disco nos tentó hacer algunas “piezas” más orientadas al formato canción. Machingo Russo (trombón y guitarra) compuso un tema en base a una vieja zapada que estaba en su computadora, dándole forma a un demo que varió un poco hasta lo que es hoy “Poman”, que cantó Santi Motorizado. Todo lo que hubo de producción fue pensando en plan Morbo Meets El Mató. Para “Portal”, que canta Nick Albrook, el que trajo la música fue Mauro Alberelli (teclados), y otra vez la composición mutó bastante entre la idea germen y la forma final. Pero Nick sugirió líneas de voz donde no las había, embelleciendo la canción a un nivel que no sospechábamos, hablando de cosas como seguir jugándosela por las ideas que uno defiende o la violencia de género.

-¿Y en el caso de “Plan de Vuelo”?

-Con Andrés Nusser, que canta ese tema, fue un poco diferente. Él prefirió no escuchar la referencia de voces, pidió permiso para encarar por otro lado y lo que salió fue sorprendente. Un flash inesperado. 

 -¿Cuándo fue que definieron a los interpretes? ¿Ustedes escribieron las letras o son de cada cantante?

-Surgió todo después, a medida que avanzábamos con el disco. “Plan de Vuelo” tiene una parte del poeta chileno Vicente Huidobro, del poema “Altazor”, y otra de Nusser. “Pomán” la hicimos nosotros, y “Portal” fue escrita en castellano por Maxi Russo, traducida por Matu Aguilar (batería), salvo toda la último tramo, que es de Nick.

-¿Piensan en la vida sin música?

-Afortunadamente, existe gente aún para la que el arte y, más puntualmente la música, forma parte intrínseca de su vida: se levanta y desayuna escuchando música, sale a la calle con auriculares, y así hasta la noche.

*Viernes 13 en Niceto Club, Niceto Vega 5510. A las 19.