"Nos interesa la sonrisa en el rostro ajeno"

Instruido por Pitufo Lomardo; Raúl García (Falta y Resto) y Lolito Iribarne (Contrafarsa), Marcelo García es, además del protagonista de esta nota, el director de Preparate el 7, agrupación que está conformada por artistas de ambos márgenes del Río de La Plata. Murga uruguaya y tango porteño, la base de este grupo.

-Están próximos a festejar su octavo aniversario, ¿cómo arrancaste el proyecto?

-Nace por una necesidad: encarar algo que me identificara más con lo que hacía y en el lugar donde hoy vivo. El tango y la murga son los ritmos que más amo. Es por eso que se me ocurrió llamar a gente amiga, que estuviese apta para este proyecto. El mismo día que les conté del grupo, le pusimos nombre y arrancamos.

-La propuesta fusiona diversos géneros rioplatenses, ¿consideras que esto se dio con mayor naturalidad gracias a que la mayoría de los integrantes participaron en proyectos similares?

-Lo que proponemos es un poco diferente a la murga tradicional uruguaya, ya que va hacia algo más rioplatense. Indudablemente, la cuestión de poder fusionar dos estilos con tanta presencia te hace crecer, ya que, si no sos tanguero, le vas a poner más atención al tango, y lo mismo se aplica para la maurga. La historia de ambas músicas indefectiblemente te hace madurar.

-¿La elección del repertorio surge a raíz del tango o de la murga?

-Casi siempre, nos decidimos desde el tango, porque el estilo murguero ya está en las voces y arreglos. En base a eso armamos el hilo conductor del espectáculo. El repertorio es pura creación de los guríes, que escriben tomando parte de las letras de los tangos, para así formar un show con sentido y humor. Los temas también cumplen una función determinada en el armado final del repertorio: permiten manejar los distintos climas que se van produciendo a lo largo del espectáculo.

-¿Hay un común denominador de la música que fusionan?

-Lo que más llama la atención es haber podido sacar al tango del terreno de lo nostálgico y poder llevarlo a uno más alegre. Lo hacemos sin faltarle el respeto, tanto al tango tradicional como a la murga, ya que no resignamos el lunfardo, el arrabal y le agregamos la bohemia, la impronta, y la forma del canto murguero.

-¿Hay alguna idea madre que le bajes a la banda?

-Lo que intento transmitirles es que, desde el esfuerzo y el convencimiento, todo se puede. Hay que tratar de hacerlo lo más profesional posible, sin perder lo humano y la confianza de saber que las cosas están en orden en todo sentido. Artísticamente, sabemos que somos capaces de hacer algo fusionado, con gente de acá y de allá, y que el público no pueda distinguir quién es argento y quién yorugua. (Risas)

-¿Qué tan difícil es divertir y hacer reflexionar al público?

-La parte de reflexionar se la dejamos a las murgas tradicionales uruguayas, las que concursan en Montevideo, que por la esencia están obligadas a dejar un mensaje. Nosotros obviamos esa parte y nos abocamos más al humor, que es lo que nos interesa: la sonrisa en el rostro ajeno. Hoy por hoy, el público tiene mucho para reflexionar en su vida personal y nosotros queremos funcionar como su cable a tierra, en la medida que nos permitan y podamos lograrlo.

*Sábado 23 y domingo 24 en El Emergente, Acuña de Figueroa 1030. Junto a Milongas Extremas y Lucio Arce.