"Sentimos la música desde mucho antes que existiera la banda"

La banda nació por el amor a la música pero se terminó de materializar en las reuniones de un grupo de amigos que vino desde el sur del país para comenzar una nueva etapa de sus vidas en Buenos Aires. “Si no nos dedicábamos a la música estaríamos haciendo cerveza casera o comiendo jabalíes en algún bosque”, contaron con sentido del humor.

-Teniendo en cuenta que desde chicos son fanáticos del género tropical, ¿por qué no se dedicaron plenamente a tocar cumbia?
-Desde el año 1997 en adelante seguíamos mucho la movida tropical, pero también lo hacíamos con el rock, el ska y los clásicos. De hecho, “Falsa Cubana” encajaba perfecto para una banda de cumbia pero una vez que arrancamos con la banda, salió toda esa música que llevábamos dentro y se generó una mezcla de estilos que hacemos hasta el día de hoy. 

-Se vinieron de Chubut a Buenos Aires a trabajar y estudiar, pero luego terminaron formando la banda, ¿cómo se rompe con el esquema de la seguridad que puede brindar un trabajo y una carrera para armar una banda?
-Se fue dando de a poco. Cada concierto, cada kilómetro recorridos juntos como banda y cada disco nos fue acercando más al profesionalismo. Por suerte muchos pudimos estudiar, trabajar y llevar la banda a la vez. Mientras uno siga firmemente su vocación, en este caso la música, el resto se acomoda solo.

-¿Las historias personales que plasman en sus letras contienen la intención de que sus seguidores las hagan propias para poder identificarse?
-Seguramente a muchos les queden pintadas. Contamos cosas que nos pasan, anécdotas, vivencias y relatamos ciertos personajes.  Si eso después alguien lo toma como propio, mucho mejor.

-¿Qué aprendieron en la realización del último disco que les hubiese gustado saber en los discos anteriores?
-Con el correr de los años fuimos aprendiendo cada vez más a pre-producir mejor  las canciones. Nos tomamos el tiempo que nos haga falta y también lo tomamos para armar cada canción. Lo hicimos en Picante (2011) y lo volvimos a hacer en Bajo los Huesos (2014), dedicándonos aún más tiempo. Eso hace mucho más fácil las cosas a la hora de grabar.

-¿Por qué quisieron hacer más rockero el último disco “Bajo los Huesos”?
-Se fue dando solo. Por un lado veníamos armando las canciones en formato power trío sumando la trompeta. Además, cambió la formación con respecto a Picante, y no tenemos más teclados. Eso ayudó a que se volviera más rockero y directo. Con un poco más de voltaje que antes. Fue una fotografía del momento.  ¡Quizá ara el próximo disco nos pinta más para el lado del Chamamé!

-¿Cómo se manejan a la hora de componer las canciones?
-Componemos todos, música y letra. Nos gusta cómo funciona de esa manera y es algo que también se dio así, sin buscarlo. Hay canciones donde uno compone la música, otro le realiza arreglos, otro escribe la letra y otro la canta. No somos egoístas a la hora de decir que el que la escribe también la canta. Priorizamos siempre la canción.

-¿Cómo es su relación con las demás bandas de la escena?
-Muy buena. Además al ser del interior pero vivir en Buenos Aires, tenemos contacto con  bandas de distintas escenas dentro del país. Hay una movida que se vino dando en los últimos años dónde las bandas emergentes, lejos de actuar de manera individualista, nos hemos unido. Eso fortalece y enriquece el circuito abriendo el abanico. Es muy lindo ver cómo las bandas se unen para darse una mano entre sí.

 Txt: Christian Peremartí

*Falsa Cubana se presenta este sábado 21 de noviembre en Niceto Club, Niceto Vega 5510, a las 20 hs.