"Me da cierto orgullo mirar hacia atrás y ver todo lo que logré en esta aventura"

"Caminante no hay camino, se hace camino al andar", reza el poema de Machado que popularizó Serrat y que ahora parece la definición perfecta para el momento que vive Leandro Aput, más conocido como LEA. Es que a poco de un año desde su salida de Cabezones, a fines de 2007, este guitarrista y compositor mendocino, admirador de Cerati y Spinetta, viajó rumbo a Madrid para reinventarse y resurgir como el Áve Fénix.

 

-Es intenso y divertido. Se podría decir que la vida me ha llevado a convertirme en un trotamundos; porque en un proyecto tan personal, como lo es el mío, es la dinámica de tener nuevas expectativas y desafíos, lo que hace más enriquecedora toda la experiencia.

 

-Entonces, ¿se podría decir que es una necesidad estar en constante movimiento?

-Totalmente. Hace poco, una amiga me regaló un concepto de la música que me parece muy acertado; ella me dijo que "la creatividad es como el agua, por lo que había que mantenerla en constante movimiento para que no se estanque". Por eso, entiendo y acepto, que son las experiencias vitales fuertes, las que hacen más atractiva esta propuesta.

 

-Creo que quedan los valores y principios que me enseñaron, desde pequeño, en mi casa. Después, siento que soy distinto en varios aspectos; pero no es algo que me incomode. Inclusive, no es necesario remontarse tan lejos en el tiempo, porque soy diferente de aquel que se fue hace 5 años; creo que si uno no se permite cambiar a largo del camino, entonces se pierde de todo lo lindo que se puede sumar al crecimiento personal. 

 

-Después de tu salida de Cabezones, te quedaste un año más en Buenos Aires y rápidamente emigraste a Madrid. ¿Por qué? 

-Mi salida de Cabezones fue algo muy triste. En aquel momento, mientras elaboraba el duelo armé lo que terminó por resultar, sin saberlo, mi primer disco, Luz día, y encontré en la composición una forma de canalizar lo que me pasaba; una vez que lo tuve listo, decidí ir a Madrid para intentar valerme por mi mismo. Por eso es que me da cierto orgullo mirar hacia atrás y ver todo lo que logré en esta aventura.

 

-Y esta aventura, de la que hablás, también te llevó a visitar México.

-Sí, y fue realmente algo buenísimo. Nunca esperaba una recepción tan cálida como la que recibí allí, pero tuve la oportunidad de ir a editar el disco a tierras aztecas y lo hice, y después de eso, empecé una gira promocional, con mi guitarra al hombro, que duró cinco meses. Así que cuando vuelva, luego de esta visita a Buenos Aires, tendré que ir nuevamente a revalidar el romance con el público.

 

-Si, por suerte tenemos un par de fechas confirmadas. Tal vez, la más importante por el escenario y lo que representa para el circuito, es la que vamos a realizar el día 24 de enero en el Matienzo; también tenemos una presentación el 9 de enero en Santa Fe, otra el 5 de febrero en Montevideo y seguramente un par más por la costa atlántica. Otra fecha que espero ansioso, es la del 25 de enero, en lo que va a ser un recital tributo a Gustavo Cerati, junto a grandes artístas, en la provincia de Mendoza.

 

-Si, soy muy admirador de la obra de Gustavo. Lamenté muchísimo su partida, pero quiero creer y pensar que está en un lugar mucho mejor; yo no era amigo de él ni tampoco alguien cercano a su círculo íntimo, pero me dolió mucho lo que pasó. Por eso mismo, va a ser un hermoso momento poder regalarle ese concierto.