Revista El Bondi - 15 AÑOS DE ROCK
Seguinos en
Banner

Lucas Rossetto

Lucas Rossetto: "El público argentino es difícil, pero fanático"

Cronista: Lucas González | Fotos: Gentileza: Prensa

14 de Noviembre, 2020

Lucas Rossetto: "El público argentino es difícil, pero fanático"

El "productor de cosas", como él mismo se define, ideó Catharsis, un festival de indie intercontinental que este sábado 14 se podrá ver de forma gratuita a través de YouTube.

No es un buen momento para ganar plata, pero sí para hacer y desarrollar proyectos”, reflexiona Lucas Rossetto, quien en medio de la incertidumbre global, y tras la angustia de cancelar 67 fechas programados hasta agosto, ideó Catharsis, un festival comprometido, diverso, equilibrado en género y estilos que se podrá ver el sábado 14 de forma gratuita a través de YouTube. En la primera edición del evento se transmitirán de corrido una docena de showcase que durarán entre 12 y 20 minutos e incluirán créditos mexicanos (Acidez, Dolores de Huevos, Aparecidos, Los Blenders, Fryturama, Wohl), argentinos (Bestia Bebé, Las Ligas Menores, Tigre Ulli), españoles (Texxcoco), estadounidenses (Las Nubes) y peruanos (Suerte campeón).

Hay personas que quieren ser compositoras, esto o aquello. Pero hay otras a los que simplemente nos gusta la música y queremos vivir de ella, y aceptamos que tenemos que formar parte de un equipo”, se presenta Rossetto, héroe del indie intercontinental que ganó credibilidad en el ambiente gracias a su paso por el estudio (según Linkedin, grabó y mezcló 14 álbumes) y a su trabajo con Él Mató a un Policía Motorizado (les operó el sonido de 2012 a 2018).

Junto a los platenses aprendió casi todo lo que ahora aplica al desarrollar bandas a nivel internacional (Bestia Bebé, Las Ligas, Apartamentos Acapulco, Suerte Campeón, Carolina Durante, Kokoshca, etc.). A diferencia de un manager tradicional, él se dedica a generar espacios por fuera del mercado natural de sus representados. Aunque si se le pregunta, hoy Lucas se define como un productor de cosas: “Discos, giras, shows. Salvo componer canciones, porque nunca me interesó, hago de todo un poco”.

El también responsable de la agencia de booking y management El Brillante sostiene que la pandemia nos igualó a todos: ricos, pobres, clase media. También a la escena musical, ya que tanto Las Ligas Menores como Molotov están imposibilitados de tocar en vivo. Con todo, entiende que todavía hay formas de progresar. “El Catharsis movilizó a más de 100 personas en cinco países y ninguna se enfermó”.

De hecho, cuenta un aliviado Rossetto, en Guadalajara, México, hasta hicieron un concierto para 80 espectadores previo a la filmación: “No es lo ideal, es lo que tenemos. A veces se estigmatiza al público de la música, porque si se puede ir a un bar o un restaurante, se tiene que poder reeducar a las personas para que disfruten de un show en vivo”.

Pese al distanciamiento social y las restricciones sanitarias que impone el Covid-19, para el argentino instalado en suelo azteca “se pueden hacer un millón de cosas diferentes”. El problema, continúa, pasa por la escasa o nula respuesta de las autoridades: “Ya debería haber un protocolo para todo. Que el lugar o el grupo decidan si es o no rentable un recital. Al menos den la posibilidad para que se puedan poner en funcionamiento, porque sino están matando una industria”.

-¿El tuyo es un modelo de negocio redituable?

-Te diría que no. Pero evidentemente hay un mercado que va a crecer.

-¿Y para qué lo hacés?

-Para mostrar que por más que haya una distancia gigante, si armás una playlist, todas los nombres están terriblemente relacionados entre sí. Hay una escena hispana que es súper fuerte a partir de Los Planetas, El Mató, Los Punsetes, Café Tacuba. Ellos generaron un cúmulo de grupos que tienen un género muy similar, que se cruzan y comparten casi el mismo público, aunque no parezca. Los Blenders, por ejemplo, son grandes en México y tienen seguidores en la Argentina, pero nunca se van a animar a ir.

-¿A qué se lo atribuís?

-Todavía no hay agencias ni productoras que se dediquen a desarrollar productos pequeños. Entre los desbalances de la economía y que los artistas internacionales no invierten, no penetran en la cultura local. Lo que intento hacer, por lo menos con los músicos españoles con los que trabajo, es explicarle que el público argentino es difícil, pero fanático. Si vas una vez, espera que vayas una segunda, tercera, cuarta. Si te ve una vez, te quiere ver diez veces más.

El organizador de 35 años planea retornar con planes que, sabe, no son rentables en lo inmediato, pero que a futuro pueden funcionar. ¿Su próximo movimiento? “Mi sueño es volver con Los Punsetes. O que pueden ir Carolina Durante y Cariño. No van a ganar lo que ganan en su país, porque allá son gigantes, pero sí me gustaría que vivan la experiencia de lo que es un show en la Argentina”.

En ese sentido, la mixtura sonora que ofrece la grilla del Catharsis es un intento de concientizar y sensibilizar el oído de sus compatriotas, para que por lo menos asimilen grupos geográficamente cercanos, “algo muy difícil” por el momento. “Muchos son geniales y no triunfan por un prejuicio que tenemos”. Pareciera que “cuesta más consumir una propuesta de Uruguay, Chile o Colombia que de Estados Unidos”. 

-¿En México ocurre lo mismo?

-En México la gente es melómana apasionada. No le importa el país, ellos escuchan música y quieren que vayas a tocar. Están muy acostumbrados a recibir cosas de afuera. Y en España sucede algo similar. Tienen 183 festivales por año, entonces, buscan, investigan. La escena es muy fuerte y hay bandas consideradas indies que llenan estadios, como Carolina Durante, que con apenas dos años de existencia vendía un show para 12 mil personas.

-Al margen de la inestabilidad económica, la mayoría de los eventos organizados por el Estado tampoco incentivan la participación de actos como el Carolina Durante.

-Depende mucho de los curadores, porque son muy pocas las cosas que se pueden hacer en gestión cultural siendo independientes. Y muchas veces lo que produce el Estado no está muy linkeado a una escena independiente o mainstream, por así decirlo, sino más a una forma de hacer mercado. Por eso para el Festival Emergente suelen bajar proyectos relativamente grandes, pero que no necesariamente van a romper en el mercado argentino.

-¿Por qué?

-Porque llevan productos súper locos o folclóricos. No es Apartamentos Acapulco, que, si bien hace shoegaze, al final termina siendo una banda con canciones pop. Al igual que con Los Blenders, Las Ligas y Bestia: tienen detalles de un género, pero comparten eso, que son pop.

-¿Es la razón por la que funcionan tan bien El Mató, Las Ligas y Bestia Bebé en España?

-Además, las tres tienen una poesía directa, un mensaje claro y entendible en todas las regiones. No usan slang, en general, ni expresiones muy del argentino. Eso los favorece mucho.

-¿Qué caracteriza al indie español?

-Tiene que ver más con un género y no tanto con lo independencia. Allá el DIY no existe, todas las bandas tienen un sello y cuatro personas trabajando atrás. Es otro circo.

-¿Y en la Argentina?

-Es una forma de ver la industria, de moverse, de manejarse con tu público, con la prensa. Pasa por mostrarte de una manera más genuina y básica. Capaz que no vas a llegar a los mismos lugares que el mainstream, pero se hace un camino alternativo que no por eso tiene menos valor.

TODAS LAS FOTOS