Rodrigo Crespo: "El rock necesita morir y renacer muy seguido"

Además de la polémica que se produjo en torno al lugar que ocupa el reggaetón en la industria, la última edición de los Grammy latinos sirvió para que el gran público conozca a Rodrigo Crespo. Radicado en Los Ángeles hace ya siete años y con un extenso recorrido como músico y productor (Louis Armstrong, Shakira, Daniela Herrero, Ana Free y Marilina Bertoldi), el argentino fue nominado por la Academia en la categoría “Mejor canción de rock”, gracias a “Conectar”, track que integra su álbum debut, Careta (2019).

“Es y seguirá siendo una gran alegría, una palmada en la espalda que me impulsa a trabajar mucho más fuerte y de alguna manera valida el esfuerzo”, dice Crespo sobre el reconocimiento. “Se siente muy especial, por ser el principio de mi proyecto solista. Siendo un artista independiente lo veo como una herramienta muy fuerte de difusión”.

-Aprovechando la nominación, ¿qué es hoy en día el rock para vos? Muchos dicen que está muerto.

-El rock es una actitud, un discurso y una perspectiva que va mucho más allá de la música. Se alimenta del cambio, la renovación y la reencarnación para mantenerse vivo. Por definición, necesita morir y renacer muy seguido, porque si se estanca deja de ser lo que es y se vuelve costumbre, norma y cliché. Me encanta ver cómo muta y se nutre de otros estilos. Por eso, siempre me interesaron los artistas que juegan en y con los límites del género.

-Luego años de trabajo con terceros, decidiste publicar tu primer disco. ¿Por qué ahora?

-Sentir la necesidad de hacer una música que ningún otro proyecto me estaba dando. Así fue que, a lo largo de los más de dos años que duró la producción de Careta, decidí tomarme un tiempo, mirar para adentro y entender quién era como artista, cuál era mi estilo y mi personalidad sonora. Tenía que encontrar una identidad que me representara mucho como para poder ponerle nombre y apellido a Careta.

-¿Y cómo definirías tu propuesta musical?

-La producción me dio una soltura especial en varios estilos, y eso se nota en algunos cambios y contrastes muy marcados que aborda el disco. Adopté libertades, como fusionar el rock con ritmos e instrumentos propios del folclore argentino. O tomar ideas propias de la música electrónica. Todo eso formó una docena de canciones originales, que se potencian por contraste y hasta a veces por contradicción.

-¿Cómo es la escena musical de Los Ángeles?

-Están los extremos y, al ser una de las capitales mundiales de la música, da lugar a miles de artistas de todos lados, así que uno siempre tiene la posibilidad de conocer movimientos diferentes. Pero para resumir, últimamente me encantó el electro rock poderoso de Bones UK, el folk retro del brasileño Rodrigo Amarante y el pop funk colorido de las locales Haim.

-Con respecto a lo argentino, ¿estás al día con lo que se produce?

-Trato. De lo último que salió me copa Wos, Louta, Conociendo Rusia y, aunque no tan nuevo, me gusta mucho el folclore ecléctico de Duratierra y las canciones de Matías Zapata y Juan Mayo. Me coparía que artistas me mandaran sus demos o ideas porque siempre quiero colaborar con gente que tenga ideas frescas y diferentes. De hecho, estoy terminando de producir Suah, el primer disco de Nana Arguen, y me tiene alucinado: es una música hipnótica, muy sensible y con melodías de buenos aires spinetteanos.

*Jueves 5 de diciembre en Berlina Vorterix, Avenida Federico Lacroze 3499. A las 21.