Revista El Bondi - 15 AÑOS DE ROCK
Seguinos en
Banner

Cabezones

Como buenos religiosos, queremos terminar el año en el Templo

Cronista: Gentileza: Pablo Gabriel Krause | Fotos: Beto Landoni

10 de Febrero, 2006

Como buenos religiosos, queremos terminar el año en el Templo

La gente de Cabezones decidicó arrancar el 2006 a toda máquina y alista los motores para grabar en El Teatro su primer disco en vivo. Por si fuera poco, editan la placa en EE.UU. y piensan cerrar el año a lo grande.

Con siete discos sobre sus espaldas y unos diez años de carrera, Cabezones se prepara para darle forma a su primer disco en vivo, que graban este sábado 18 de febrero en El Teatro Colegiales. Después de presentarse en los festivales de Gesell y Cosquín, César, Gustavo y Leandro (cantante, bajista y guitarrista, respectivamente) se hicieron de un tiempo para hablar con La Bitácora y dejaron en claro que van por más…

¿Cómo se arma la lista de temas para un show como el del 18?

Gustavo: No fue fácil al principio, porque es un show donde en realidad nos gustaría tocar todo. Tendría que ser un show de más de tres horas. Pero en esa síntesis que de alguna manera tenemos que hacer, la idea es mostrar lo que, a nuestro paracer, son las mejores canciones de Cabezones y algunas nuevas que todavía estamos viendo.

Además van a editar el disco en México, donde ya tocaron un buen tiempo, y en EE.UU. ¿Qué expectativas les genera?

César: Para nosotros ya es un triunfo que el disco esté en la batea en Estados Unidos. Pero también aprendimos, sobre todo en el paso por México, que el disco hay que apoyarlo. El simple hecho de que esté ahí no va a hacer que lo compren por arte de magia, la idea es preparar una gira, pero también hay cosas que no podés predecir de antemano y que se van dando una vez que estás ahí.

¿Creen que los va a beneficiar el hecho de sacar un disco en vivo, con canciones que probablemente la gente afuera ya conoce?

Leandro: Nosotros solemos ser, en lo que respecta a shows en vivo, una grata sorpresa para la gente, sobre todo en festivales. Para darnos a conocer a gente que nunca escuchó Cabezones, el “vivo” suele ser nuestro fuerte y registrarlo nos puede servir mucho.

Si bien durante la carrera de Cabezones hay un hilo conductor, “Jardín de Extremidades” muestra un costado un poco más melódico. ¿Cómo tomó el público esa evolución?

César: A mi me gusta mucho las bandas que sacan discos diferentes uno del otro, como fue Soda Stereo en los 80’s, que si bien seguía sonando la voz de Cerati y demás, los discos entre sí eran diferentes, y eso hace que una banda siga creciendo musicalmente. Es lo que nosotros buscamos y los ejemplos que tenemos cerca. Es como una vertiente del “nuevo rock”, y precisamente es el parámetro que tenemos como banda: no tener parámetros.

Más allá de no ser una banda multitudinaria, Cabezones ya se ganó un espacio en la escena local. ¿Eso los condiciona a la hora de componer y de pensar qué espera el público?

César: Nosotros creamos un público exigente y hasta medio perverso, que no nos perdona ninguna, pero siempre está expectante, no se adueña del show. Es muy exigente y está bien, porque los acostumbramos así. No nos podemos quejar, porque tampoco me gusta el otro público. A partir de eso, a la hora de componer, los temas nos tienen que cerrar a nosotros, sino, menos le va a cerrar al público. Es la única manera de componer que tenemos.

Hubo un tiempo en que tuvieron que bancarse mucho rechazo del público, sobre todo cuando compartían escenario con otras bandas (Iron Maiden en Velez, en el 2001, por ejemplo). Hoy la historia es muy diferente. ¿qué cambió? ¿ustedes, el público, se ganaron el respeto...?

César: Yo creo que nos ganamos el respeto. Nosotros no somos una banda que ya tenía una onda ni un público establecido, como le puede pasar hoy a una banda de punk o rock and roll. Nuestro público lo fuimos haciendo nosotros a medida que fuimos creciendo. No había una banda nü, dark, alternativa, o como quieras llamarnos… pero siempre fuimos genuinos. Nos ganamos el respeto por ser una banda profesional a esta altura de nuestra carrera.

En una misma semana tocaron en Gesell y en Cosquín, donde el público también es bastante heterogéneo. ¿Qué balance hacen de los festivales?

Gustavo: Fueron grillas muy parecidas en los dos festivales (Babasónicos, Arbol y Miranda!) y el balance siempre es positivo. El hecho de que nos convoquen ya es un reconocimiento, y la posibilidad de mostrar tu música ante semejante diversidad de público es muy buena para nosotros. César: Además Cosquín es el único festival federal que hay en Argentina, está enclavado en la mitad del país y hay gente que viene de todos lados. Y la respuesta fue tremenda, la gente estaba arengadísima, muy prendida.

Un nuevo disco hace suponer, además, una nueva gira…

César: Sí, se viene una gira muy grande. Empezamos en marzo y la idea es tocar en todo el país. Vamos a ir de nuevo a México y el cierre lo queremos hacer en un lugar muy importante, que sea significativo para la banda. Leandro: Además la gira de “Jardín de extremidad” se hizo el año pasado, que fue un año difícil para tocar y nos quedaron muchos lugares para volver. Este año tenemos que hacer una gira grande por eso, para suplir los lugares donde no fuimos, volver a ir a donde ya estuvimos… César: Y como buenos religiosos, terminar en el templo.
TODAS LAS FOTOS