Cirse
"En este disco nos permitimos sonar diferentes, pero sin perder la esencia"
26 de Octubre, 2017
La identidad no se negocia.
Luciana Segovia y Gabriel Leopardi, la vocalista y el guitarrista de Cirse, conversaron con El Bondi acerca de Karma -su último trabajo-, sobre cómo se permitieron ciertas licencias, para volver a disfrutar de hacer música, y de qué manera influyó en ellos la participación de Oscar Mediavilla como productor.
-¿Qué representa este disco en la historia de Cirse?
Gabriel Leopardi: -Más allá de que la gente pueda oír las canciones en forma separada, un disco significa un nuevo momento en la vida de una banda; una situación en la que cambia todo, renovás la imagen, tenés canciones nuevas y oxigenas el repertorio.
-Se revitaliza la banda
GL: -Cada álbum es un momento, una bisagra, desde el primero que funcionó como parte fundamental de este presente; recuerdo que cuando sacamos nuestro primer disco -Bi polar- , hubo gente que nos dijo para mí arrancaron recién ahora y eso que ya llevábamos 4 años juntos como banda.
-¿Vivieron en algún momento eso que llaman "vacío creativo"?
Luciana Segovia: -Con Gaby es imposible que se vivan esos momentos. De hecho, para este disco había compuestas cerca de 40 canciones y al pobre Oscar (Mediavilla) le llevamos un montón para que viera todo lo que teníamos (risas).
GL: -Es cierto, igual filtramos un poco y le llevamos 20; de ese número nos dijo: “¡¿Pero, ¿cuántos quieren grabar?!” (risas). Y bueno, resolvimos que con 14 pistas estábamos bien. Finalmente, terminaron quedando 12.
-¿Cuál fue la búsqueda artística de Karma?
LS: -Nosotros buscamos darle un concepto a todo el disco. Desde el primer momento, y con estos doce temas, supimos que expresó a la perfección lo que ya teníamos para decir.
-Pero si se escucha el disco, ¿se entiende ese concepto?
GL: -No, vos vas a entender lo que es la banda. Nosotros queríamos que este disco nos represente mucho más que los anteriores.
-¿Fue buscado por algo especial?
GL: -Porque siempre está presente esa necesidad. Queríamos que este trabajo refleje nuestro crecimiento y nos cruzamos con un tipo como Oscar, que nos trajo felicidad y amor por el simple hecho de estar haciendo música, algo que después de 14 años a veces se hace un poco difícil.
LS: -Tal cual. Oscar todo el tiempo nos decía eso, que la historia más difícil de la banda ya la habíamos escrito y era algo de lo que nosotros no nos dábamos cuenta. Nos remarcó teníamos lo más valioso a cuestas que fueron nuestros primeros discos, el hecho de mantenernos unidos e ir para el mismo lado. Por eso, Mediavilla, nos ayudó a que nos podamos divertir y relajar en este proceso de grabación.
Justamente, hablando de Mediavilla, les pidió que "se relajaran y se quiten todo tipo de ataduras".
GL: -Sí, y eso fue lo nos pasó desde el primer momento. Esta vez, nos sentamos y dijimos: "Vamos a elegir la canción por el sólo hecho de que nos guste, y no porque sea más heavy o más rápida". No nos preocupó tanto la sonoridad ni el estilo, sino que esté buena. Y en eso Oscar nos acompañó y dejó que le demos para adelante. Gracias a que nos permitimos sonar diferente a otras veces, logramos un disco más amplio, pero sin perder la esencia.
-¿Y qué pasó cuando lo escucharon?
LS: -Somos bastante obsesivos con nuestro laburo y ya veníamos escuchando algunas bajadas de los temas. Eran escuchas grupales, junto con Oscar, con Patricia Sosa (que siempre nos decía, "que discazo, que discazo"), con los técnicos. Cuando nos dábamos cuenta, éramos 12 personas. La verdad es que el disco tiene una energía muy linda, de un grupo unido.
-¿Cómo se preparan para el show del 4 de noviembre?
LS: -Estamos trabajando muchísimo desde lo visual y con todo lo que tiene que ver con la puesta en escena. Es una ocasión muy importante para nosotros y esperamos que no falte nadie a la cita.
*Sábado 4 de noviembre en el Teatro Vorterix, Federico Lacroze 3455. A las 19.