"La respuesta del público argentino es abrumadora"

Para muchos, son el “quinto grande” del thrash metal. Para otros, inclusive, deberían estar incluidos entre los cuatro principales (por convención, The Big Four: Metallica, Megadeth, Slayer y Anthrax). Eso sí, lo que está fuera de discusión es que Testament es uno de los más fieles y emblemáticos exponentes del sub-género pesado que surgiera a principios de los ‘80 en el área de la Bahía de San Francisco. Con The Brotherhood of the Snake (2016) bajo el brazo y más de 30 años de carrera sobre los hombros, el quinteto recorrerá América Latina durante agosto, para recalar, el jueves 24, en el Teatro de Flores. Antes de comenzar del tour, el guitarrista Eric Peterson, único miembro fundador que permanece en la banda, reveló por qué les gusta tanto venir a la Argentina.

-Para el que aún no escuchó The Brotherhood of the Snake, ¿cómo lo describirías?
-La temática es un poco loca, medio misteriosa y tenebrosa. Hay muchas referencias a aliens y una raza extraterrestre. Igualmente, la música siempre viene primero y es un álbum bien fuerte, bien thrash. Pese a esto, a los fanáticos del metal, aunque les guste una banda, a veces que les cuesta escuchar los discos nuevos.  

-¿Van a tocar muchas de estas canciones nuevas en el tour?
-Tenemos preparado un setlist muy especial. Desde que empezamos a girar, siempre tuvimos que tocar los clásicos. Habíamos quedado atrapados en un ciclo, porque queríamos cambiar las listas, para hacer cosas nuevas, pero cedíamos: “no podemos dejar afuera tal tema”. Pero en este tour en particular logramos agregar canciones raras, y solos especiales de cada miembro, aunque sin comprometer los clásicos.

-¿A qué te referís con solos especiales?
-Cuando era chico e iba a conciertos, siempre había un solo de guitarra, uno de bajo, otro de batería. Y ahora Testament está tratando de recuperar eso. Está bueno que cada miembro tenga su momento para lucirse y expresarse. Agrega mucho al show, especialmente para una banda como la nuestra, que toca con un ritmo altísimo. Por eso esta gira se van a ver cosas que jamás hicimos, y que no sé si volveremos hacer.

-Tienen un largo viaje hasta Argentina, ¿qué los motiva seguir viniendo?
-Muchas razones. La buena gente, la cultura, la comida. Pero lo principal son los fans y la comunión que se genera. Cuando nos subimos al escenario y empezamos a tocar, la respuesta del público es abrumadora. Es un sentimiento inexplicable, es pura felicidad. Nosotros vamos a Sudamérica una vez cada dos años aproximadamente, aunque nos gustaría ir mucho más seguido.

-Se cumplieron tres décadas de la salida de The Legacy, álbum debut del grupo. ¿Cuáles son tus objetivos como músico, después tantos años de carrera? 
-Considero que la mayoría de las bandas dan lo mejor que tienen en sus primeros tres o cinco discos. Después hay algunas pocas excepciones, que por alguna razón se van volviendo cada vez mejores con el paso del tiempo. Es muy difícil lograr eso, pero hay conjuntos que lo lograron. Rush y Slayer son buenos ejemplos. Y creo que nosotros entramos en esa categoría. Nos volvimos más pesados y melódicos. Probablemente, sea debido a los cambios de bateristas, por tener la oportunidad de tocar con grandes exponente del instrumento, como Dave Lombardo (ex Slayer), Paul Bostaph (actual Slayer), John Tempesta (Exodus, Rob Zombie). A la hora de componer, termina siendo una gran influencia. Si tuvieras un mismo batero por 20 años, llegaría un punto en que no querría tocar como vos le pedís, sino como él quisiera (risas). Y el objetivo siempre es elevar la vara con cada CD.

*Jueves 24 en el Teatro de Flores, Avenida Rivadavia al 7800.