"Nunca pensé que íbamos a durar treinta años"

“Empecé en una banda haciendo covers en inglés, tocando la viola y cantando. Igual que ahora". Sentado en una mesa de un bar de Palermo, Fer Pita evoca una trayectoria musical que parece eterna. Con un presente que lo tiene a cargo de la voz líder de Heroicos Sobrevivientes, luego de la partida de Segundo Gassiebayle, conecta con los inicios del grupo y con su prehistoria heroica, casi un nómade camaleónico del rock and roll. Vivió dos años en el sur, en tiempos de comunidades hippies, al regreso armó una banda de rock en Palermo, luego cantó el heavy clásico de Sabbath y Maiden, cuando se mudó a Sáenz Peña, hasta que una zapada en Núñez lo conectó con Tigre, donde terminó de cobrar forma la leyenda del Pita rocanrol. 

Desde los bajos fondos de la Zona Norte empezó a moldearse una banda clave del rock stone local. “Mi amigo Alejandro Servide, que Dios lo tenga en la gloria, me llevó a una prueba en Tigre. Quedé, pero tenían un nombre muy feo, Los braguetas calientes. No me gustaba nada”, recuerda Fernando, quien tenía una idea dando vueltas, y que terminó de moldear, para dejar atrás ese nombre con aroma punk. “Venía de tocar en un banda que se llamaba Heroica y relacioné ese nombre con la letra de ‘Pantalla del Mundo Nuevo’, de mi amigo Michel Peyronel”, devela el músico. “Heroicos sobrevivientes darán el golpe final”, anunciaba esa letra apocalíptica, presagiando, también, la vigencia de un grupo que repasará cronológicamente sus tres décadas con un concierto muy especial el sábado 22 de julio en el Teatro Vorterix.

-El 8 de julio se cumplieron 30 años del primer show de Heroicos Sobrevivientes. ¿Cuál es el primer recuerdo que te viene a la mente?
-Cuando empezamos creíamos que éramos la mejor banda del rock and roll y que íbamos a llegar enseguida a la cima, porque alguien se iba a dar cuenta. Nunca fuimos a timbrear a productores ni a discográficas. Pensábamos que solo con tocar alcanzaba. Lo que nunca pensé es que íbamos a durar tres décadas.

-Pese a los años de escenario, sólo publicaron cinco discos de estudio, y uno de ellos de reversiones. ¿Por qué?
-El rock and roll estuvo relegado en las compañías, no es remunerativo, no vende como vende una canción romántica. El rock repuntó muchísimo, pero lo que llaman rock, porque el verdadero rock and roll, no, y creo que hace falta una propuesta como la nuestra. A nosotros nos hicieron fama de que no queremos saber nada con las discográficas, y no es así. 

-¿Cómo viene el nuevo disco? 
-Estamos grabando muy despacio, porque queremos que sea con un sonido impresionante, aunque la idea es presentarlo a fin de año. Grabamos en vivo, y eso se va a notar, son los mismos rocanroles heroicos que la gente conoce y también esas canciones dramáticas y apocalípticas que muchos tomaron como himnos.

-¿Te considerás un referente de la escena rock?
-Con Ale Servide armamos el grupo con la idea de defender el rock and roll. Cuando empezamos todo era la famosa bestia pop, sólo estaban los Ratones Paranoicos, todavía existía Riff, y no había más rock and roll. La idea era que los chicos que vinieran después de nosotros supieran que el rock and roll estaba vivo y en buen estado, y creo que en parte lo conseguimos. 

-¿Cómo te sentís ante la partida de Segundo Gassiebayle y tu vuelta a la voz líder? 
-Es muy difícil para la gente que sigue una banda cuando se va el cantante. La única experiencia que tuve fue con él, y en parte funcionó, y en parte no. Ahora que decidió irse, y encarar un nuevo proyecto, volví a hacer lo que hice siempre. Por suerte, la gente lo aceptó. 

-¿Cantar requiere una preparación extra?
-Hago vida sana cuando no tengo que salir a la noche. Ya el hecho de subir de tocar la guitarra provoca mucha adrenalina, y si a eso le sumamos cantar, es toda una satisfacción. Para un escenario grande como el de Vorterix hay que estar preparado, requiere un ejercicio, y por eso me preparo mucho.

*Sábado 22 en el Teatro Vorterix, Federico Lacroze 3455. A las 20.