"Ya perdí el interés por tener los discos en formato físico"

Marilina Bertoldi es una artista multi instrumentista oriunda de Santa Fe, que se mudó desde chica a Capital Federal para dedicarse a la música. Su potencial y vuelo creativo como compositora quedaron expuestos desde aquel entonces en diversos proyectos y en sus tres discos solistas: El peso del aire suspirado (2012), La presencia de las personas que se van (2014) y Sexo con modelos (2016). Y, pese a que formó parte de la Connor Questa, ella prefiere no hablar del pasado y enfocarse en su presente y futuro como solista.

-¿Haber editado digitalmente tus anteriores discos influyó en que el último salga de manera de manera física y digital?
-No. Quienes más insisten en la fabricación de los discos hoy en día son los sellos. Personalmente, ya perdí el interés en tenerlos en formato físico. Me parece que, en caso de ser necesario, se pueden fabricar simples, como siempre se hizo. Pero el álbum entero, para entrar en el mercado sucio de la distribución, los escasos puntos de venta y toda esa mafia, no tiene mucho sentido para artistas que no somos tan grandes.

-¿Esperabas la repercusión que tuvo?
-Esperaba repercusión, definitivamente no la que consiguió. Es bueno que cada disco sorprenda para bien, como lo fue Sexo con modelos, que me llevó a otra escena, exposición y tesitura. Por eso, el día que cumpla todas mis expectativas será una sorpresa negativa.

-Según tu experiencia, ¿cómo influye el reconocimiento de su trabajo en un artista? 
-En todo sentido. Parte de uno y sólo de uno. Incluso, si la decisión del artista es no involucrarse en la producción de su disco o en la composición, ya está afectando sustancialmente al posterior reconocimiento de su trabajo, ya que tendrá otro impacto, otra forma de ser analizado por quienes se encarguen de hacerlo. Y ni hablar de cómo uno luego lo defienda o no. De cómo hables, de que tan correcto seas. En lo que a mí respecta, dejé completamente de lado el miedo que me llevaba a ser correcta.

-¿En algún momento te hicieron creer que por el hecho de ser mujer tu lugar en la música era limitado?
-Tuvieron que pasar muchas cosas en el país y en el mundo para que pueda verlo. Inicialmente, siempre negué que hubiera una diferencia, pero eso era simplemente porque no lo podía ver, estaba acostumbrada y lo daba como un hecho natural, así como les pasa a los hombres. Hay algo que es muy claro y muy notorio en todo ámbito, pero me voy a referir específicamente al mío: las mujeres tenemos que demostrar que somos buenas, de lo contrario se entiende tácitamente que al ser mujer no sos tan buena como un hombre. En otras palabras, "no somos pares, hasta que se demuestre lo contrario". Lo cual es una lástima, porque nos condiciona a nosotras también. 

-¿Entonces?
-Personalmente, me acostumbré a tener que estar convenciendo gente, demostrando, entrar a un lugar y tener que hacerme valer, cuando por ser hombre cualquiera de mis compañeros sólo tenía que decir "hola". Ese acostumbramiento lleva a un cansancio, a convencerse de que uno no es igual, de que uno no lo vale. Todo depende de tu humor del día. ¿Y sabes qué? Nadie de los que me juzgaba valía ni un mínimo de lo que afectaban a mi autoestima (dixit). Pero no lo veía, porque para mí era natural, era así, no era por mi sexo, era porque yo seguro no era lo suficientemente buena y, en el fondo, hacían bien en dudar.

*Viernes 1 de septiembre en La Tangente, Honduras 5317. A las 21. (LOCALIDADES AGOTADAS)

Viernes 1 de septiembre en La Tangente. A las 22.30. 

Sábado 18 de noviembre en Ciudad Cultural Konex, Sarmiento  3131. A las 19.