"Volvimos a tener pretensiones y conflictos artísticos"

Las Bodas Químicas son José Lavallen, Nicolás Daniluk (ex integrantes de The Keruza) y Andrés Tersoni. Anteriormente José (ahora entrevistado por este medio) y Nicolás también fueron parte de Keruzones, un trío instrumental que luego de cumplir su ciclo los impulsó a concretar este proyecto musical junto a Andrés. 

Sin dudas todo su bagaje es parte del presente, como historia, aunque no están supeditados a él y a través de la continua experimentación musical van descubriendo y puliendo su identidad. En 2012 lanzaron su primer larga duración (el homónimo), tres años después el EP Tentenpié y finalmente el año pasado su último disco, Juguete de Troya.

-Entre el primer disco y Juguete de Troya el sonido mutó. ¿Qué creen que intervino en estos años para que ocurra?

-Seguramente todos los shows que venimos dando y todas las cosas buenas que trae el paso del tiempo: confianza, mayor enfoque, claridad y alguna que otra maña, que seguramente debe haber. También la vida misma y sus diferentes momentos. Algunos son "momentos de mierda" y, como dice Nico, son como el estiércol, que transforma en abono esos momentos (sic).

-¿Creen que la identidad de la banda se da desde la experimentación o es algo premeditado?
-Uno trata de seguir aquel lema, "hacer la música que queres escuchar", y siempre es una mezcla de experimentación con ese deseo. No recuerdo que hayamos dicho "qué bueno hacer un tema así o asá" y llevarlo a cabo. Mejor dicho, uno puede decirlo muchas veces, pero de musiquero (sic) apasionado nomás; luego las cosas no se hacen así, salen de otra forma, por otro canal, que no está premeditado.

-¿Cómo fue el proceso creativo de Juguete de Troya? 
-Siempre que se está terminando un disco, aparecen unas puntitas de lo que viene, casi como una respuesta al hecho de estar tan metidos en un material, tan en etapa de "finalización" (entre comillas gigantes, suponiendo que haya finalización). Una parte arrancó bien temprano, con nuestro anterior trabajo. Ahí vinieron un montón de conciertos y cuando empezaron a aparecer más canciones, sacamos Tentempié. Es decir, gambeteamos el acto de "sacar el segundo disco de estudio" y editamos otra cosa, otro viaje. Finalmente, nos encontramos con el repertorio nuevo, hicimos demos y buscamos a Ale Vázquez. 

-¿Por qué lo eligieron como productor? ¿En qué medida influyó en el resultado final? 
-Nos interesaba por su experiencia, por el hecho de que fuera una especie de "cuarto miembro de un trío" con los Carajo. Además, ¿por qué no? También tuvimos en cuenta lo que otros músicos dijeron de él. “Vázquez escucha música como escucha la gente; no solo como los músicos, periodistas o personajes del palo", le oímos decir a Richard Coleman. Enseguida nos sedujo. Su incidencia nos ayudó a desenroscarnos, a confiar y a sintetizar la propuesta. Aportó su "sabiduría alegre" -así lo mencionan en los créditos internos del disco.

-¿Consideran que la experiencia en otros proyectos musicales los favoreció?

-Esa experiencia es algo nuestro, propio. Ya es parte de nosotros, nos hace ser quien somos. Me gusta pensar que nos favorece y mucho, aunque no sé si usaría esa palabra.

-¿En algún momento sintieron que ese bagaje los podría condicionar?
-¿Condicionarnos? No, todo lo contrario.

-¿Cuál creen que fue el punto de quiebre que se dio entre Keruzones a Las Bodas Químicas? 
-Siempre supimos que Keruzones era el primo de The Keruza, uno que no tiene pretensiones ni demasiados conflictos artísticos. Un auténtico proyecto paralelo, lateral, muy querido y vital para nosotros. Al terminarse la etapa de The Keruza, Keruzones ya no tenía tanto sentido y decidimos (sin planearlo mucho) que sería un vehículo para dar con Andrés, refundarnos y volver a tener un proyecto de música propia. ¡Y ahí sí, alegremente, volver a tener nuestras pretensiones y conflictos artísticos! (Risas)

-Después de tantos años de conocerse, ¿cuáles son las ventajas y desventajas que se presentan en su "hermandad" artística?
-El viejo lugar común nos ayuda a responder una vez más: toda banda que dura años se parece a un matrimonio, muchas ventajas y algunas desventajitas también, pero no deja de ser un acto de amor. Como bien dicen los Babasonicos, "no es el amor para recaudar ventajas" (NdlR: Se refiere a la canción "Run Run", del disco Romantisísmico).

-¿Cuáles son las expectativas para la presentación del disco?
-Tratamos de tener más ganas que expectativas, aunque es difícil no tenerlas. Queremos que sea una celebración y entregar lo mejor de lo nuestro. "Dejar todo en cada show",  quizás suena a frase hecha pero es realmente así para nosotros. 

*Viernes 14 en The Roxy Live, Niceto Vega 5542. A las 20.