"La cumbia es el folklore de América"

Mezcla de ritmo y elegancia, baila y alegría. El origen de la oquesta Sonora Marta La Reina está predeterminado por una meta: hacer cumbia, ¡y de la buena! Con su primer trabajo, Cumbia Sabrosa (2013), establecieron las pautas a seguir (cuidado del sonido, por sobre todas las cosas). Dos años después, nacería El Viaje de la cumbia, un disco puntilloso en que se priorizan, a diferencia del anterior, las composiciones originales.

-Siendo una orquestas (con la cantidad de personas que hay involucradas) que aborda diversos ritmos, ¿qué priorizaron y qué relegaron para este segundo álbum?

-Priorizamos, sobre todo, las composiciones nuestras y la experimentación con los arreglos de vientos y acordeón. Siempre con un criterio orquestal-bailable pero no por eso menos arriesgado.Asimismo, esta vez relegamos varios covers que, de hecho, ¡habían quedado bárbaro!

-¿Hay diferencias sustanciales entre El Viaje y Cumbia sabrosa?

-Sí, en nuestro primer disco la meta era sonar como las orquestas de antes y al mismo tiempo con nuestra impronta personal. Y si bien la mayoría de las canciones eran versiones, también hubo composiciones propias. Ahora, en el segundo álbum, tomamos el anterior como punto de partida y dimos varios pasos más allá e hicimos un trabajo más arriesgado e innovador en cuanto a las composiciones y arreglos. De alguna manera perece que hemos logrado sonar como una orquesta tradicional, pero de un lugar que no existe geográficamente, ya que solo se encuentra en nuestra imaginación cumbiera.

-Mencionan que en el nuevo trabajo está integrado (casi en su totalidad) por composiciones propias, que no desentonan con la los clásicos de otras orquestas ¿Qué diferencias encuentran entre sus composiciones (actuales) con las de otros grupos (antiguos)?

-Tratamos se respete el estilo, pero los arreglos son mucho mas "modernos" que las orquestas de antes. Al mismo tiempo, incorporamos el sonido de un acordeón bien colombiano-cumbiero tradicional, que nunca se mezclo con las orquestas clásicas.

-En relación a la pregunta anterior, ¿cómo cambió, si es que lo hizo, la forma de interpretar la cumbia y todas sus variantes?

-Bueno, la cumbia salió de Colombia y Panamá hace mas de 70 años. Luego, comenzó un viaje interminable por toda América, en de donde fue tomando instrumentos y cadencias, modificándose constantemente, arraigándose en cada lugar donde fue llegando y así convertirse en lo que es hoy, el folklore que hermana a todo un continente.

-El Viaje fue grabado en ION, junto al Portuges Da Silva (técnico del estudio), alguien clásico dentro de la escena nacional. ¿Cómo fue ese contraste, de trabajar con alguien, quizás, de otro palo?

-¿Fue excelente! Y realmente no es de otro palo, ¡al contrario! Grabamos igual que cualquier otra de las cientos de orquestas que lo hicieron durante 50 años ahí: todos juntos, en un mismo cuarto y al mismo tiempo, sin posibilidad de editar ni corregir. Esta manera es muy exigente, pero aporta un sonido cálido, grande y vivido. Suena orgánico y muy real.

-Desde un lugar más académico, el sociólogo Pablo Seman afirmó que “la cumbia nos dice mucho de la realidad social”. Para ustedes, ¿qué representa el género?

-Es el sueño, que buscaba Simón Bolívar, de la patria grande hecho realidad a través de la cultura. Es un idioma que nos hermana a todos los latinoamericanos más allá de la lengua española.

-Hace un par de años se establecieron, definitivamente, grupos como Los Bonitos, Totoras o, inclusive, Agapornis. ¿Qué opinión les merece ese tipo de propuestas? ¿Todo suma para difundir el género?

-Creo que son grupos que salen a cubrir la necesidad que tiene la gente de bailar y escuchar cumbia. Son la demostración de que, aunque sea ninguneada, la cumbia es folklore. Forma parte, al igual que el agua y el pan, de las necesidades básicas. Estos nuevos grupos han recibido duras criticas por no ser “del palo” y, sobre todo, por ser de clase media (rubios). Antes que nada, creemos que la discriminación siempre es mala. Siempre. También consideramos que estos grupos están sobre dimensionados, pero son sinceros en lo que hacen y ojalá más personas de “otros palos” se lancen a la cumbia.