Revista El Bondi - 15 AÑOS DE ROCK
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Juan y los que rien

Pachanga dark

Cronista: Gentileza: Leo Ros

10 de Noviembre, 2008

Pachanga dark

Muertos de risa.

Juan Maiorano es un cantautor treintañero que se pasó casi la mitad de su vida tocando en diversas agrupaciones y componiendo música. Entre algunas de las cosas que hizo, se destaca haber compuesto algunos temas para programas de televisión, como por ejemplo “Son de fierro”, la tira costumbrista que Canal 13 emitió el año pasado. Del fruto de esa unión salió el primer “hit” de Juan, “Tu madre”, cortina de la temporada 2007 de “Mujeres asesinas” de Pol-ka, la productora de Adrián Suar. Esos aires de vida cotidiana, tan presentes en las ficciones del “Chueco”, son moneda corriente en “Pachanga dark”, el primer disco de Juan y los que ríen, que a pesar del “y los…” es el proyecto solista de Maiorano.

El álbum arranca con “Lloro y canto”, una canción de raíz tanguera y rioplatense, de las que abundan a lo largo de toda la “Pachanga dark”. Amor, llantos e intervenciones divinas son el leitmotiv de este tema. Sigue “En la sombra”, una composición en donde el Juan argentino se parece demasiado al Juanes colombiano, pero con un poquitín más de arrabal y fumo. “Lucecita” tiene misterio y existencialidad de supermercado, pero es llevadera. “Tiempo loco” trae una cadencia cumbiera arábe inusitada, con una letra justa para que alguna mujer de 29 viva su cambio de década.

“Te quiero ver”, tiene una cierta influencia del poprock español, sobre todo cuando dice “Voy a flipar sin vos”, y es una de esas historias de romance y desencuentro. “Delirium tremens” nada tiene que ver con aquella perla del “Enemigos íntimos” de Paéz y Sabina, sino que es otra de las creaciones de Juan, con frases corte “Beber de tu boca el sabor del consuelo”, y así.  Si faltaba algo más para completar el combo, aparece “Que tristeza humanidad”, una ¿canción de protesta? en la que el bueno de Juan tira: “La televisión no puede educar a nadie, padres y maestros lo tendrían que enseñar”. Claro que la paradoja está en él mismo, cantándola en un disco en el que la estrella es: ¡la cortina de un programa de TV!

“La loca” es una pretenciosa narración de una “minita loca que tiene prisa”, que, al parecer, rompió el corazón del malherido Juan. ¿Más mujeres? Pero claro que sí mi amigo, ahí llega “Mujer”, pegadita a “Tu madre”, la consabida cortina, con aires españoles. “Del mismo vino” intenta ser una pintura de porteños y milongueros, pero muere como boceto. El final promete más pachanga con “Cachondeira” y “Cumbia” pero todo se queda ahí, en la vergüenza ajena y el desparpajo comercial.

Juan Maiorano se recibió en la escuela de las inconsistentes canciones cortas y directas, ideales para el oído de la dama y el bolsillo del caballero.

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