Turf (Reversiones)

El calendario pasado, con solo 10 años de carrera, Turf se dio el lujo de ser homenajeado por un grupo de artistas (Los Auténticos Decadentes, Andrés Calamaro, Los Tipitos, Daniel Melingo y Leo García, entre otros) que reversionaron su por entonces reciente material “Para mi, para vos”.

Un año más tarde, un poco más acaramelados con la idea de reinventarse (y eso que disco a disco mutan sobre una base de rock), decidieron volver el tiempo atrás y darle a sus canciones más hiteras, como también a aquellas menos populares, un toque singular. Pero atención, que cuando hablamos de que se fueron para atrás, se fueron muy para atrás.

Llegaron hasta los 40 y convirtieron a su reciente sexto álbum, “Turf”, en un remate de radio propio de las décadas pasadas. Con un locutor de lujo (Cacho Fontana) que oficia de presentador las canciones se suceden a través de un rompecabezas acertado. El disco comienza con “Despiole generacional” (aquel rock de su primer disco que interpretan con el padrino Say No More) en un jazz versión low fi con un agregado especial de “My favorite things” de famosísima The sound of music (La novicia rebelde). En “Cuatro personalidades” la guitarra de Leandro Lopatín confirma su descendencia Stone versión “Simpathy for the devil”. La hermosa “Magia blanca” deja la palidez, florece y se vuelve reggae, “Quiero seguir así” se llena de rock and roll galopante que invita y “Loco un poco” es un mash-up contagioso con el “Himno de mi corazón” Abuelo como bandera.

En “Oh Dios” la banda se pone en plan de moda y recrea a Babasónicos en una versión destacada.”No se llama amor” es un rockabilly pero esta vez adaptación Turf. “Pasos al costado” baja todos los cambios que propone su letra y se despoja para brillar en voz y teclas en una balada de calidad. Para el final dejan su fiesta preferida: “Yo no me quiero casar, y usted?”.

A pesar de que casi todas las canciones superan a las originales en cuanto a técnica, son pocas las que consiguen desbancar a las primeras. “Pasos al costado”, “Magia blanca” y “Oh dios” podrían quedar en el plano ascendente.

Turf confirma con su disco homónimo que todavía le quedan trajes, colores y calidad para seguir mutando en lo que ellos decidan.