Rey Momo
Muchomomo
05 de Diciembre, 2006
Tercer material de la banda pampeana. Un mix de estilos con contenido.
La Pampa no solo se caracteriza por ser una de las provincias menos populares de la Argentina sino que también es uno de los distritos que menos aportó al conglomerado de bandas nacionales de rock. Pero para alivianar ese proceso de espera que se genera en el interior del país, los chicos de Rey Momo producen anualmente el festival “Música x más”, donde bandas locales salen a demostrar lo suyo como teloneras de grupos más reconocidos como Sancamaleón o Árbol.
Justamente uno de los cantantes de la banda de Haedo, Pablo Romero, fue el encargado de producir “Muchomomo”, el tercer disco del conjunto pampeano. En el mismo la banda logra un carnaval de hip rock, con toques de funk, chacarera y hardcore.
Pese a que la influencia de los Red Hot Chili Peppers es notoria, la banda demuestra condimentos más allá del ají putaparió. El material arranca al palo con la chacarera rock “Enano verde”. En “Tas kemado” confirman su condición de banda hip rock. “1 millón de mariposas” demuestra que la banda sabe como bajar un par de decibeles para construir una bella balada de amor. Le siguen la poderosa “Siento rock” y la electrónica hiphopera “En tu panza”.
En la mitad del material aparece aquel touch californiano propio de los Peppers: “Viejoviejaviajo” tiene el aporte característico de la guitarra de John Frusciante. Un tema con una cadencia contagiosa que cuenta la experiencia que tuvieron que vivir los músicos a la hora de anunciar su viaje para afincarse en Buenos Aires. “Pienso/siento” podría ser la crónica de una pareja en Cromagnon sostenida por una base hardcore. Estilo que continúa en “Hasta la esquina”.
Sobre el final la banda corrobora que la participación de Pablo Romero también dejó lo suyo en la rapera rockera “Tengo un reflejo”, con juego de voces incluido. Y para el corolario se dan el gusto de hacer su propio “Road Trippin” chacarero en “Rio Negro”.
Rey Momo tiene todo el borbollón necesario para convertirse en un conjunto al que cual rendirle culto. Una banda que nació del sueño y de la noche, un disco para exprimir todo el año.