Chamanes con onda

Una murga al ritmo de tambores, maracas y bombos dieron la iniciativa e indicios de lo que pasaría una hora más tarde. Es que antes del show la banda de La Paternal, hubo una especie de previa bailantera de la mano del grupo Ensamble Muraturé, a pura percusión en medio del campo del Malvinas. El estadio se llenó de buena onda y clima festivo, lo que dejó la mesa servida para el plato fuerte.

A las 22 horas las luces se quedaron con los protagonistas de la noche. El grupo formado por Maxi Prietto ( voz y guitarra), Santiago Moraes (voz y guitarra acústica), Martín Ferbat (bajo), Fer Barrey (percusión y coros), Miguel Mactas (Guitarra eléctrica) y Pipe Correa (batería y percusiones) hicieron sonar las primeras notas con “Huracanes”, primer tema de su último trabajo Agua Ardiente (2017)el cual fue motivo de su gira. Siguiendo con la fuerza de la percusión y con un toque psicodélico siguieron “La crecida” y “Jugo”, uno de los temas más festejados por la gente.

Con una gran capacidad para generar distintos climas, esta vez la banda fue por un sonido más tranquilo y oscuro con “La mirada”, “Ruso blanco”, “La mina de huesos” y “Perdida en el fuego”. La noche siguió por el mismo rumbo en el que el público se dedicó no tanto a mostrar su efusividad pero si a escuchar y disfrutar de los solos de guitarra de “Las armas las carga el diablo” o la letra de “Esa luz”.

Los fanáticos se volvieron a levantar y se hicieron escuchar con “Jesús rima con cruz”, “Perro viejo” y “Vamos a la luna” a la que se le sumo una improvisación liderada por percusiones y efectos de guitarra. Para terminar, la banda que el año pasado estuvo en una de las fechas del Lollapalooza y que va creciendo en popularidad, hizo sonar “Noches de verano” y “La rueda”, en lo que fue un show de aproximadamente tres horas.

Los Espiritus hicieron sonar un largo setlist repasando sus tres discos de estudio: Agua Ardiente, Gratitud (2015) y el homónimo del 2014. La fiesta se completó con una lista de invitados en la que aparecieron Tomas Vilche de Los Bluyines en guitarra eléctrica, Tulio Simeoni de La Patrulla Espacial en percusiones y Walter Broide de Poseidotica en bombo legüero.