Revista El Bondi - 15 AÑOS DE ROCK
Seguinos en
Banner

Bulldog

"El primer disco nuestro fue puro amor"

Cronista: Sergio Visciglia | Fotos: Gentileza prensa

17 de Marzo, 2017

"El primer disco nuestro fue puro amor"

Vuelven los festejos para la banda rosarina, rememorando la edición allá por 1997 de su álbum debut, Un lugar para juntarnos. ¿Cómo era todo por aquellos tiempos? ¿Y cómo es todo ahora? Acá nos lo cuenta el cantante Hernán “Mantu” Mantoani.

“Habíamos grabado un casette, lo mandamos por correo, en sobre de madera, y le llegó a una disquería y justo estaba buscando grupos para hacer un compilado en el que también entraron Flema y Sin Ley, por ejemplo. Y de ahí nos eligieron para grabar un disco”. El recuerdo de Mantu del comienzo de gestación del disco debut de Bulldog nos muestras sin dudas que veinte años son mucho en estos tiempos en los que la tecnología viaja más rápido que el tiempo.

Y así viajamos a la actualidad, en la que la banda festeja los veinte años de aquellos tiempos con un show en Groove el próximo sábado 18 de marzo, con Flema como banda invitada. Al mismo tiempo la banda cranea también lo que será su próximo disco de estudio, grabando demos pero en 2017. “Los discos muestran el momento de quienes los componen. Por ejemplo te peleás con tu novia y después fuiste papá, y ahí cambia la lírica rotundamente. Cuando grabamos Repolución cada uno estaba en la suya, por su lado y eso se nota, uno lo ve de adentro y capaz afuera no se nota tanto, pero creo que sí. El primer disco tiene una adrenalina, una energía, un frenesí, típico de los 18 años que teníamos. Nos vinimos en una Siam Di Tella, sin saber nada, y fue un hito para nosotros y nuestra gente”.

-Tiene esa magia de no estar contaminado por nada.

-Es puro amor, la cabeza limpia. Capaz se nos ocurría algo y todos decían “qué bueno está”. Ya al cuarto disco es “que pavada que es esto” (risas). Plasmabas lo que tenías ganas.

-¿Cómo salía de ustedes a una edad tan corta eso de decir que había que grabar, mandar el demo a lugares y demás cuestiones?

-Había un empuje tremendo. Nosotros veníamos a recitales de acá, buscábamos fanzines, nos los llevábamos y después les mandábamos cartas para contactarnos. El empuje ese lo tenés o no, igual que ahora, aunque sea más fácil. Por ejemplo, primera gira a Rio Gallegos, hay que ir en auto, y vamos, después vemos, pero vamos. Y eso no lo hacen todos, si no tenés ímpetu y ganas no va, y no importaba lo que suceda. Los primeros shows de Cemento fueron así, era salir de Rosario, con la guitarra colgada, cinco pesos para el tren, y volver corriendo porque nos perseguía el guarda (risas). Pero habíamos llegado a Cemento.

-Está bueno que cuentes eso para las bandas nuevas. Porque a veces el hecho de que algo pueda estar más al alcance logra que haya menos exploración.

-Es que es parte de una historia. Nunca fuimos de mirar mucho para atrás o adelante. Creo que la primera vez fue cuando hicimos el disco de los 20 años, y estuvo bueno ver todo lo que habíamos logrado, bien de abajo. Hace que uno valore mucho donde está parado, y que agradezca todos los lugares que fue conociendo, y entender que nos está yendo bien, y eso que no somos un grupo que te mete cinco mil personas, pero lugar donde tocamos, hay mucha gente, en distintos lugares del país. Y eso lo empezamos a entender hace poco.

-¿Cómo fueron gestando eso de viajar por todos lados y tener buenos resultados?

-Hace 17 años empezamos a encarar eso de viajar mucho. Nos dimos cuenta de que no todo estaba acá en el centro. La primera vez que fuimos a Ushuaia creo que solo habían ido Los Fabulosos Cadillacs, y después hicimos Rio Grande, Rio Gallegos, y en un montón de lugares empezamos a ir y no iba ninguna banda. Y luego empezaron a ir muchas, y eso nos vino bien para poder volver, que empiece a haber un circuito. Somos muy inquietos y tratamos de abrir a otros países, vamos a México, ahora estamos por cerrar para volver a España que siempre intercambiamos con La Fuga. Si el grupo está un mes sin tocar ya empezamos a preocuparnos, “que pasó acá, nos separamos” (risas). Y si había que dormir en el escenario, había que hacerlo. Hoy día, primeras fechas en lugares de Latinoamérica, si hay que dormir en la camioneta, dormimos. Eso te lo dan las ganas y la alegría con la que hacés las cosas, si no, no te la bancás.

-¿Qué foto te viene a la mente de lo que fue ese disco debut, Un lugar para juntarnos?

-El estudio, compartir la creación del primer disco, comprar la comida, juntarse, eso no me olvido más. Vos ves las fotos (las reales) que sacamos, con el viejo rollo, y las caras de alegría eran geniales, todos contentos, saltando, comiendo, grabando. Una hermosa anécdota para contarles a mis nietos. Para nosotros eso ya fue algo grandioso.

-¿Y qué recordás del cicuito de esos tiempos?

-Cemento, Die Schule, Arlequines, muchos lugares en Avellaneda y Gerli, por la amistad que teníamos con los chicos de Flema, armándonos nuestro caminito, dejar de ser invitados para empezar con los shows propios. Uno de los primeros fue en La Plata, con un grupo que se llamaba Mal de Parkinson, y donde la luz era un foquito colgando.

-Son una banda de rock, pero con mucha base y raíz punk, ¿cómo nació ese germen?

-Nuestra estructura de canciones mayormente tiene el punk rock, como así también otros estilos, claro. No éramos solo de escuchar solo punk igual, se escuchaba mucho metal, hard rock, algún reggae, pero la mayoría éramos del palo más duro. Pero claro, tocábamos lo que era más fácil de lograr. El otro día leía una nota que decíamos: “Tocamos punk rock porque el heavy metal era dificilismo”. (Risas). A mí me gustaba siempre más la simpleza de una canción de los Ramones.

-Y se viene el show de Groove…

-Vamos a hacer el disco entero, todo, de pe a pa. Y después los clásicos de los demás discos, con los amigos de Flema como invitados. Creo que va a ser un show emotivo para los seguidores de la primera camada de Bulldog, y también para sus hijos que vienen con ellos, je. Por suerte tuvimos recambio de público, si no, con todo respeto, pero seriamos una banda retro de los ’90, que te llevan a tocar a las fiestas retro.

-Yo hago unas fiestas que se llaman La Noventosa, ¡vénganse!

-Bueno, ahí tenés, estaríamos tocando ahí (risas).

*Sábado 18 en Groove, Avenida Santa Fe 4389. A las 19.  

TODAS LAS FOTOS