Once Tiros
Glamour y Violencia
Cronista: Gentileza: Bruno Lazzaro
20 de Noviembre, 2005
Desde que comienza Glamour y Violencia, primer tema del disco debut homónimo de los uruguayos Once Tiros, es inevitable hacer una comparación inmediata con los también yoruguas de La Vela Puerca.
Desde que comienza Glamour y Violencia, primer tema del disco debut homónimo de los uruguayos Once Tiros, es inevitable hacer una comparación inmediata con los también yoruguas de La Vela Puerca. Sería una falta importante no resaltar este dato ya que los influjos recibidos por Once Tiros son muy evidentes.
Ritmos pegadizos con tintes de ska, una manera de cantar muy similar a la de Sebastián Teysera y unos vientos muy parecidos son algunos de los links directos a La Vela. Los separan algunos aportes tangueros (Que no decaiga), alguna que otra máquina, un rock más furioso (Mal de Karma) y más reggae (Dormilón) que sus pares.
En “Calaverita Culón” sacan a relucir un dejo piojoso que recuerda al Taxi Boy de los de El Palomar. Ya son muchas las bandas uruguayas que consiguieron aceptación en el país.
Once Tiros, siempre y cuando se saque el polvo mágico que les transfirieron los creadores de “A contraluz”, tiene todos los componentes básicos para crecer: buenos músicos, vientos, letras directas (algunas de protesta y otras de historias) y otras indirectas de aventuras de barrio y divague nocturno.
Cabe destacar que la manera de cantar rapeando (Televidente) parece cada día ir sumando más adeptos y a su vez despreocupándose más por la capacidad y la calidad de la voz principal. Temas para destacar: la post coca “Para” y la exquisita y llena de paz “Callejón”.
“Violencia y Glamour” es un disco que si se escucha sin tener un conocimiento acerca La Vela Puerca sería excelente, pero por ser el primer álbum y entender que esto acarrea una fuerte influencia nada más baja a un Muy Bien. Un punto de partida más que interesante para una banda que tiene muy en claro que es lo quiere.
Ritmos pegadizos con tintes de ska, una manera de cantar muy similar a la de Sebastián Teysera y unos vientos muy parecidos son algunos de los links directos a La Vela. Los separan algunos aportes tangueros (Que no decaiga), alguna que otra máquina, un rock más furioso (Mal de Karma) y más reggae (Dormilón) que sus pares.
En “Calaverita Culón” sacan a relucir un dejo piojoso que recuerda al Taxi Boy de los de El Palomar. Ya son muchas las bandas uruguayas que consiguieron aceptación en el país.
Once Tiros, siempre y cuando se saque el polvo mágico que les transfirieron los creadores de “A contraluz”, tiene todos los componentes básicos para crecer: buenos músicos, vientos, letras directas (algunas de protesta y otras de historias) y otras indirectas de aventuras de barrio y divague nocturno.
Cabe destacar que la manera de cantar rapeando (Televidente) parece cada día ir sumando más adeptos y a su vez despreocupándose más por la capacidad y la calidad de la voz principal. Temas para destacar: la post coca “Para” y la exquisita y llena de paz “Callejón”.
“Violencia y Glamour” es un disco que si se escucha sin tener un conocimiento acerca La Vela Puerca sería excelente, pero por ser el primer álbum y entender que esto acarrea una fuerte influencia nada más baja a un Muy Bien. Un punto de partida más que interesante para una banda que tiene muy en claro que es lo quiere.
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