Revista El Bondi - 15 AÑOS DE ROCK
Seguinos en
Banner

Rata Blanca

La Llave de la Puerta Secreta

Cronista: Gentileza: Bruno Lazzaro

24 de Julio, 2005

La Llave de la Puerta Secreta

Al escuchar los cortes que Rata Blanca eligió para que circulen por las radios, la idea de que “todo sigue igual” puede rondar, con sabiduría, por la cabeza de cualquier cazador de hits. Pero la verdad no es esa. “La llave de la puerta

Al escuchar los cortes que Rata Blanca eligió para que circulen por las radios, la idea de que “todo sigue igual” puede rondar, con sabiduría, por la cabeza de cualquier cazador de hits. Pero la verdad no es esa. “La llave de la puerta secreta” es un disco distinto, y varias razones son las que sostienen esta afirmación. Primero porque la banda prueba con otros géneros: blues, hard rock y baladas (no como “Mujer Amante” sino de esas melosas) entre otros estilos. Segundo, porque cuentan historias medievales, algo que no suelen hacer.¿?. Tercero, por el nombre del disco, que ni en pedo suena a Rata Blanca. Y cuarto, definitivo y para concluir este espacio dedicado a la sorna, porque es siempre lo mismo con un touch, no tanto no, desemejante.

De todos modos hay que separar las cosas. Adrián Barilari es un excelente vocalista y lo demuestra en temas como “Blues” y “Mamma” donde sus agudos astillan copas de amor. Pero Walter Giardino... siempre el mismo solo con vacante de originalidad. Ojo, tocado de una manera excepcional por supuesto, de eso no hay duda. Recorrido con sus dientes. De espaldas como suele vanagloriarse.

Con una lírica basada en desengaños amorosos y las tan esperadas aventuras del “Señor de los anillos”, “El gran rey del rock and roll”, pista nueve de “La llave...”, impacta con una cruda descarga hacia el Indio Solari. Con frases como “voy a ser el rey del rock and roll les daré un discurso y una ilusión” y otras como “les hablaré de cosas que nunca entenderán” . Todo, obviamente, correctamente negado por su autor (Giardino).

La cuota fantástica de este disco es su packaging. El mismo, trae una llave de metal, que uno no sabe para que usar. Ah, debe ser para la puerta secreta. ¿No?. Ojala que sea para abrir las puertas de otra percepción. Porque después de todo no es más que un guitarrista que da vuelta siempre sobre el mismo eje. Un violero redondo.
TODAS LAS FOTOS