Es como tu huella en cada acción

Cerca de las 21, Matamba se empezaba a comer el escenario acompañado de su banda, Zion. El boliviano puso a La Trastienda a bailar, a sonreír y a pensar, con una demostración de carisma y actitud. El mensaje es claro y se refleja en canciones como "Reggae rock" y "La luna y el sol".  
                                 
El telón volvió a abrirse y los acordes empezaron a correr por todo el lugar. A primera vista, todo parecía normal, pero Leo Dread, otro histórico integrante, había abandonado Gondwana. El comienzo del show fue un tanto accidentado: en "Solo es verdad" y "Nada cambió", Mc Jona, el cantante que ya lleva casi un año en Gondwana, tuvo algunos problemas con su micrófono. Pero al correr "Aire de Jah", "Ignorancia" y  "Reflejos", la banda fue entrando en clima con su público, que cantaba tímidamente las canciones de Revolucion, su trabajo más reciente, editado en 2011.

La gente se fue soltando y tomó más protagonismo cuando llegaron los viejos clásicos como "Reggae is comming", "Nadie como tu", "Antonia, "Dulce amor", "Mi princesa" y "Piénsame". Este set donde la dulzura y las historias de amor salen a pasear es un clásico dentro de los shows de Gondwana y MC Jona agradeció el calor que la gente les brindaba pese al frío.

Luego de "Revolution" los Gondwana invitaron a Matamba y el boliviano le puso su voz a "K-in" con Mc Jona acompañando, a "Yo no quiero ir a la guerra" solo con la banda y terminó con "Irie" nuevamente a micrófono compartido. Matamba ocupó el lugar de Leo Dread, la persona que le metía el flow, un voz extra y una fuerte energía, además de darle sonido a la percusión. Otro miembro más que abandona la banda, a la que sólo le quedan el bajista I Locks Labbé y el tecladista Keno Valenzuela como miembros fundadores.  A pesar de esto, clásicos como "Verde amarillo y rojo", "Princesa Calipso", "Sentimiento original", "Changa langa" y "Tu y yo" generan en el público el mismo sentimiento de siempre. 

La banda dejaba el escenario y volvía sin dejar pasar nada de tiempo para hacer "Guetto Sur" y preguntar al público qué canción quería escuchar. La elegida fue "Felicidad", otro gran clásico, tras el que la banda se agolpó junto a Matamba para saludar a la gente y agradecer el cariño recibido.

Es muy difícil tener una banda y que siga en carrera 26 años. Es difícil convivir con tantas personas, pero si el núcleo sigue, el estandarte y el ideal no cambian. El público sigue ahí y también la química entre ellos. Que sea reggae, por mucho tiempo más.