Buenisimo...con B de Blues

Desgraciadamente el Blues no es un movimiento que atraiga a los adolescentes. Y empiezo así porque me parece lamentable que el grueso del público que presenció el festival fuese de personas mayores de 30 (no porque tenga algo contra los mayores de 30, ojo, sino porque hubiera sido mas atractivo ver una mayor diversidad de edades). Es groseramente notorio como los jóvenes se tiran a estilos insulsos, a bandas totalmente vacías (desde el punto de vista que el lector prefiera elegir) y a modas estupidas dejando de lado a músicos tan interesantes y excitantes como los que pasaron el anterior sábado y domingo por La Trastienda. El show igual convocó, y muchísimo. Dejando la queja, vayamos al espectáculo.

Fueron 5 horas excelentes de puro Blues, es innumerable la cantidad de buenos músicos (Botafogo, Zakiya Hooker, Bruce Ewan, Las Blacanblus, Jorgelina Aleman y Alambre Gonzalez) que se repartieron por el escenario durante la maratónica sesión.

Pensar en esa cantidad de horas puede ser agotador, pero acá no lo fue. Y voy a volver a una idea que surgió cuando me tocó escribir sobre el show de B. Frissel, y es sobre el divertirse mientras se esta arriba del escenario. Todos los artistas la pasaron de diez, quizás mejor que el público, porque a ellos se les notaba el entusiasmo de estar tocando junto monstruos de la talla de Zakiya Hooker o Botafogo. Y pienso que fue por ese motivo que la noche no cerraba, que seguía, porque querían seguir tocando. La comparación mas obvia es la de un grupo de amigos que no se ve hace tiempo, que comparten intereses en común, y que cuando se ven, quieren que el encuentro dure lo máximo posible, así de idiota pero así de similar es la situación.

Y Pappo fue la ausencia más dolorosa de la noche. Todos y cada uno de los músicos le agradecieron a Pappo. Y esa ausencia se tradujo en una emoción totalmente sincera y desmedida cuando Zakiya canto Desconfió junto a Jorgelina Aleman.

Sinceramente se me complica mucho tratar de encontrar palabras para trasmitirle a quien lea esto lo espectacular que lo pase el sábado, es uno de esos eventos en los que hay que estar, que son irrepetibles, que no se pueden explicar con una descripción tibia de las cosas. Y quienes hayan ido, saben porque digo esto.