Incubus: Mañanas nostálgicas

Incubus, la banda liderada por Brandon Boyd regresó a Buenos Aires con una propuesta particular: revivir completo Morning View, su icónico álbum de 2001, y repasar algunos de sus hits, en un show dividido en dos partes bien marcadas.

La noche abrió de manera explosiva con “Nice To Know You” como golpe de knock out. La voz de Boyd se desplegó poderosísima en este tema, a pesar de haber estado enfermo algunos días atrás y tener que cancelar dos shows en Colombia y Guatemala.

Morning View, disco bisagra que terminó de catapultarlos a la fama en 2001, sonó entero, de pe a pa y en su orden original. Así “Wish You Were Here”, “Just a Phase” y “11am” fueron algunos de los momentos clave de la noche, entre rayos verdes que sobresalieron del escenario haciéndolo parecer una nave espacial a punto de aterrizar. Con “México”, voz y guitarra generaron un clima de intimidad que le puso la piel de gallina a más de uno, mientras que “Warning” fue la cuota de rock alternativo de los 2000 necesaria para cualquier fan.

“¿Les parece bien si tocamos unos temas más?”. Y sí, claro. Entre luces rojas los acordes de “Anna Molly” retumbaron en el Movistar Arena, dando lugar a la segunda parte del show, con canciones como “The Warmth” y “Vitamin” que pidieron a gritos pogo, o propuestas diferentes a las que los californianos nos tienen acostumbrados con “Glory Box” de la banda británica Portishead como cover.

Hubo lugar también para las infaltables “Pardon me”, hitazo incluido en el álbum Make Yourself (1999) que llevó el scratching al público y un cierre a pura intimidad con una versión acústica de “Drive”.

Después de 30 años en el camino, Incubus dejó en claro una vez más, porque siguen siendo una banda de estadios. Su regreso valió la pena.