El cantante desató una fiesta en el Teatro Broadway junto a Los Guardianes de Gregory en la presentación de Mucha Experiencia, su nuevo álbum en colaboración con artistas locales y extranjeros.
Nada parece ser más contrastante en la noche del viernes en el centro porteño que el frío inclemente de un invierno que está al caer y el calor de latitudes caribeñas que proporciona durante dos horas dentro del Teatro Broadway Bahiano junto a Los Guardianes de Gregory, el increíble combo de diez músicos que acompaña al ex Pericos en este nuevo ciclo de su vida artística. En esta ocasión el cantante y compositor llega a la calle Corrientes con Mucha Experiencia, un trabajo con versiones renovadas de los grandes éxitos cosechados a lo largo de quince años junto a su antiguo grupo, además de canciones de su posterior carrera como solista, y se palpa dentro de la sala la expectativa del público por escuchar y disfrutar de quien creó y puso su voz a temas que han dejado una marca indeleble en varias generaciones.
La banda pisa con puntualidad el escenario y ataca a puro ritmo ska con “Jamaica Blood”, del disco de Los Pericos Big Yuyo (1992). El sonido y el juego de luces son imponentes, y en el primer tramo del show Bahiano intercala temas de Pericos como “Más cerca del cielo” y “Mucha experiencia” –que levanta la primera gran ovación de la noche- con otros de su etapa solista como “Hoy sabrás”, “Así como seas”, “Óyelo” y “Fuego”. El grupo suena poderoso, muy ajustado, y el cantante anticipa que se tratará de una noche muy larga.
“No pensé que iba a pasar esto con la canción. Había un búho en una medianera de un edificio todo descascarado. Era un día horrible y titulé… ‘Tarde gris’”. Bahiano comparte cómo se gestó el hit que integra su disco Nómade (2008), una de las composiciones más reconocidas de su trayecto solista. En uno de los puntos más altos del show, el músico invita a compartir el escenario a la cantante Connie Isla, quien participó en Mucha Experiencia, para interpretar una conmovedora versión de “Cerca de mí”, un pasaje de calma y tono intimista en medio de tanto baile y frenesí. El público nuevamente se levanta de sus butacas para celebrar la llegada de clásicos sin fecha de vencimiento como “Sin cadenas”, “Pupilas lejanas” y “Runaway”. Cómplice, el cantante pregunta “¿Estamos bien gente?”, sabiendo de antemano la respuesta.
Frontman consumado, con más de treinta años de conciertos sobre sus espaldas, Bahiano recorre el escenario de una punta a otra, hace cantar al público y los invita a bailar y mantenerse en movimiento. Juega con quienes se encuentran más cerca suyo pero no se olvida de la platea, y mantiene la intensidad del show, acompañado por una banda muy sólida en la que se destaca una exquisita sección de vientos. El segundo tramo del show consiste en una catarata de clásicos que Bahiano, Juanchi Baleirón y compañía supieron concebir durante más de una década, como “Waitin’”, “Jamaica Reggae”, “Me late”, “Home Sweet Home” y el popurrí “Hacé lo que quieras/ Voy caminando lento” / Torito”, mientras canción tras canción el Broadway se convierte en un hervidero con gente bailando reggae y ska en los pasillos del teatro y registrando el momento con sus teléfonos.
Para el momento de los bises, Bahiano y Los Guardianes… sorprenden con una gran versión de “Uma Brasileira” de Os Paralamas Do Sucesso, el trío brasileño liderado por Herbert Vianna que supo estrechar lazos musicales y afectivos con Los Pericos desde sus comienzos. La banda decide viajar hasta 1987 para tocar un infaltable de cualquier velada que pretenda ser festiva, “Nada que perder”, y cierra a puro movimiento con ese clásico de los ‘90 que fue “Parate y mira”. Ahora sí, a enfrentar nuevamente el frío de la madrugada, pero con el cobijo de una música caliente, sanguínea, que invita a pasarla bien.
Bahiano volvió a los escenarios después de la pausa forzada por la pandemia con un poderoso y emotivo show, a caballo de sus clásicos de distintas etapas. Junto a Los Guardianes de Gregory, dio muestras de su vigencia ante un público fiel y de estar preparado para dar sus próximos pasos, como dice la canción, “a su manera”.