Los indispensables de la semana

AC/DC: “Realize”

El segundo corte de su notable álbum Power Up muestra a AC/DC en plenitud. Por obra y magia de la edición, la banda se junta a rockear en plano angular y suena más vigente que nunca. Brian Johnson parece levitar en modo resurrección mientras Angus Young toca extasiado entre paredes de Marshalls su canción favorita del disco.



LES CASTAFIORES: “Al borde del Sena”

La experiencia de Mario Siperman (Fabulosos Cadillacs) y la frescura de Louise Nuñez se nutren mutuamente en este viaje francoargentino por el que viaja la música y las imágenes de “Al borde del Sena”, el debut de este dúo denominado Les Castafiores. Delicadeza y frescura. Siempre tendremos París… y también Buenos Aires. Touché.

NENA X: “Poop”

La cultura pop a lo largo de las últimas décadas. Así, toda junta retocada en letra, música, y video. Las tres facetas con su mismo grado de importancia y lucidez. La energía e impronta de Sophie Miranda De Matteis (Nena X) completa perfectamente la ecuación. Pop para divertirse con acidez, ironía y calidad.

AMALIA P: “A2 a los 22”

Un punk pop con todas las letras este nuevo single de la joven cantante española de 24 años a quien hace dos le rompieron el corazón y lo descarga en esta melódica canción. Pero arriba, que todo sigue y hay cantar, bailar y gritarlo a los cuatro vientos.

JOSEFINA VERA: “¿Cuando?”

La cantautora Josefina Vera sigue adelantando su primer álbum, Amor desvirtual, y muestra su pintura más colorida para completar su amplia paleta artística. Una hermosa melodía, un sonido de maderas, acústicas y acordeón, y una historia autorreferencial que invita a hacer colectiva.



AUTOCINE: “Barcos en el cielo”

“Sé que nada viene fácil, pero viene algo mejor”. Entre el desafío y el optimismo, Autocine publicó el quinto adelanto de su nuevo disco. La banda elige el aire libre y celeste para pelar un riff rockero, intervenido por sonidos acústicos que configuran una melodía cancionera. El toque retro de la imagen conecta con la música y con la infancia, donde los barcos de papel eran toda una aventura y el cielo estaba lejos de ser un límite.