Cultivando Resistencia

Con los instrumentos ya afinados y acomodados, los muchachos de Resistencia Suburbana se hacían lugar entre el público para llegar al escenario del Marquee. Sin esperar a Fabián (primera guitarra) la banda abrió el show con Ladrones, no sin antes poner en clima a los presentes con un improvisado ‘popurrí’ a cargo de Walter (guitarra), Cristo (teclados), Leandro (bajo), Cuchu (percusión) y Traska (batería).

Antes de empezar a entonar la letra de Cuidado, Luis (voz), con remera de Bob Marley encima, pidió perdón a los fanáticos que no pudieron ingresar al Marquee (aunque estos no lo escuchasen) por “cuestiones de capacidad”, una de las tantas reglamentaciones que surgieron después de la tragedia de Cromañón. Fabián, más tarde, revelaría el verdadero problema de la banda: “si tocamos en un lugar más grande la entrada es más cara, así que... estamos atrapados”

. Mientras el calor iba en aumento, el público entonó su primer cántico futbolístico de aliento a la banda que ya son una sana costumbre. Al grito de guerra de “¡Vamos Resistencia!” un fanático sacaba fotos con su modernoso celular mientras el grupo hacía mover la cabeza de todos los presentes con su pegadizo reggae de protesta.

Resistencia aprovechó la ocasión para presentar en sociedad algunos temas de su próximo disco que verá la luz a mediados de marzo. Las letras continúan abordando las temáticas de alto contenido social, una de las características principales del reggae. Tal es el caso de Por cultivar que está inspirado en aquellas personas que perdieron su libertad por plantar marihuana (“Preso está/por cultivar marihuana”, canta Luis).

Cuando el público pedía Tuve que matar a un policía, del primer disco, Luis anunció: “este tema nos va a servir mejor”. Inmediatamente después los acordes de El dolor comenzaron a sonar para deleite de todos, hasta de los que pedían la otra canción. Luego iba a venir una excelente versión de Frágil, con la participación de Cecilia en el charango.

Después de los merecidos diez minutos de descanso, la banda volvió al escenario para continuar con su repertorio. Pasaron Explotación obrera, Confront Babylon, La unión verdadera y el cover de Bob Marley en castellano con el que dieron fin a la gran y calurosa noche: Iron lion zion.

Con más de diez años de vida, Resistencia Suburbana no pierde su mística ni sus raíces. Cada show de la banda es un viaje y momento distinto, facultad que muy pocos grupos tienen. Con disco nuevo en el horno, los muchachos no pierden esa facilidad que tienen para transmitir su mensaje que plasman en cada uno de sus temas.