"El rock está más vivo que nunca"

La llegada de Marilina al escenario de Niceto Club fue iluminada por televisores. Aportando un estilo vintage a la puesta en escena, las pantallas de los aparatos de tubo pasaron de color blanco a titilar velozmente entre rojo, azul y verde al momento de comenzar el show. Durante el resto del espectáculo continuarían encendidas mostrando planos detalle de lo que sucedería sobre la tarima.

La banda que acompañó a Marilina se vistió absolutamente de negro para asistir al recital. El toque de color lo daba ella con un top rojo que combinaba con las imágenes de fuego que por momentos aparecían en los televisores aludiendo al disco que se presentaba esa noche: Prender un fuego. Material que fue recorrido durante la hora en que la banda estuvo sobre el escenario a través de canciones como “O no?”, “Tito volvé” y el tema que musicaliza el videoclip lanzado hace dos semanas: “Fumar de día”.

"Vamos las pibas. ¿Vieron los shows de antes?", indagó Marilina haciendo referencia a Html y a Marina Fages, las dos bandas que pasaron por Niceto para abrir la fecha. "El rock está más vivo que nunca", concluyó la cantante. Y tal como prometió, el rock no se alejó del escenario siquiera cuando dejaron de funcionar los efectos tecnológicos que se le debían sumar a la voz.  Así fue que con menos arreglos de los deseados y bastante al natural salió "China". Ese no fue el único desperfecto sonoro de la noche, pero todos fueron sorteados con éxito por la banda. "¿Vinieron a ver un show de rock, o no?", interpeló la cantante al público que continuó cantando y bailando durante todo el recital. El descanso llegó en "Intervalo" cuando la artista expresó su cansancio y lo amainó acostándose en el piso para cantar todo el tema desde ahí.

"¿Qué más habrá que ceder para que todo esté vivo?", entonó Marilina entrando en el tramo final del espectáculo con "Sexo con modelos". La escena se completó con su puño izquierdo en alto, sosteniendo el pañuelo verde que proclama por la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo. "Se va a caer", aseguró unos minutos más adelante. "Lo vamos a tirar", le respondieron desde el público. La gente que asistió al lugar no dejó de bailar, saltar y disfrutar de todo el espectáculo. Incluso hubo quienes, a la salida, comentaban que hubieran querido seguir escuchando varios temas más de Marilina.

El show tuvo que superar muchos obstáculos. En cuanto a lo sonoro, ella misma expresó su descontento en varios momentos, pero hay que sumar también que esporádicamente se escuchaban sonidos que provenían desde el salón “B” de Niceto. Por otro lado, debido a la disposición del lugar, la gente que estaba al fondo no llegaba a apreciar la puesta escénica que habían pensado para el show. Dejando de lados esas cuestiones que exceden a la artista, Marilina supo esquivar cada punto en contra logrando rockear hasta el final con canciones que dejaron al público queriendo más música. Haber coordinado la fecha con Html y Marina Fages fue un gran punto a favor en un contexto en el cual las mujeres hacen falta sobre los escenarios y, sobre todo, en la escena del rock. Su set duró una hora y ya casi llegando a las 12 dijo: “no podemos amagar con hacer o no un bis porque nos quedamos sin tiempo. Asique vamos directo al bis”. Así fue como “Radacast” cerró el show.