Funk, rap, hip hop y ritmos latinos: Lo‘Pibitos están en casa

Las luces de Vorterix no se apagaron. El inicio de todo esto fueron unos cuantos rayos de luces rojas que interpelaban directo al público desde el escenario. Cuando se levantó el telón lo único que se veía eran más de 10 sombras moviéndose al ritmo de la música. Con canciones que mezclan funk, hip hop, rap y reggae, Lo´Pibitos dejó claro que sí están en casa, hay fiesta, baile y energía positiva asegurada.

El espacio del escenario era el justo y necesario para los músicos, que llegaron a ser 12 incluyendo saxo, trompeta y trombón. Lo particular de la puesta fueron las luces que a lo largo de todo el show alternaron entre rojo y azul. La propuesta fue por momentos iluminar a los artistas y por momentos al público, dejando a los músicos como sombras móviles de las cuales se desprendían los sonidos. Un juego visual más que interesante.  A eso se le sumó la pantalla ubicada en el fondo del escenario, donde se proyectaban figuras simples sobre un fondo liso y ambas cosas variaban entre rojo, blanco y negro, complementandose con las luces.

El público adhirió a la propuesta del sábado 28 de abril bailando, cantando y registrando momentos desde sus celulares. “Estamos acá ya está pasando, todo se viene acomodando. Estamos así en el lugar indicado para estar”, dicen Lo´Pibitos en “Despierta”, una de las canciones que sonó esa noche. En la hora y media de show la banda de Villa Crespo recorrió las canciones de sus dos discos con temas como “Jarabe”, “A punto caramelo” “Mágico” y “Está en Ti”. Hubo temas nuevos, temas viejos y un cover: “La rubia tarada”.

En medio del show los músicos dejaron el escenario y la pantalla se convirtió en el centro de atención. Era el momento de mostrar el nuevo video de la banda: “Nada que ver”, canción que presentaron este año como adelanto de lo que será su nuevo disco. Mientras, El Dog y Tommy cambiaron su vestuario y al volver para seguir tocando, habían dejado sus remeras blancas de manga corta, para ponerse camisa negra y abrigo.

El show continuó con un set Sound System. “No se si saben, pero el orígen de Lo´Pibitos es esto”, dijeron mientras en el centro del escenario quedaron 3 micrófonos y un DJ. La banda continuó rapeando mientras el público bailaba e incluso, quienes estaban más atrás, conversaban y tomaban algo con la música de fondo. Un ambiente tranquilo, cálido y familiar que se completaba con niños a upa o a caballito, cantado algunas de las canciones.

Las luces no dejaron de ser la apuesta principal de la escenografía. A las lámparas direccionales que ya venían utilizando, se le sumaron unas pequeñas pantallas LED que coloreaban el ambiente y luces láser que, tras sumarse todo el recita al rojo y azul del resto de las luces, en el momento final apuntó al público con destellos multicolores.

Al terminar el show, los músicos se juntaron para saludar al público y sacarse una foto: algunos con el pañuelo verde del aborto legal en el cuello, otros sosteniendo un cartel que pide “No al fracking en Mendoza” y no dudaron en pedirle al público que levante las manos bien alto para que también se los pueda ver en la foto.

Con este show, queda más que claro que todavía queda mucho por innovar en el mundo de la música y Lo´Pibitos tienen grandes propuestas con respecto a ritmos y a puesta en escena. Tienen energía, ganas, amigos, un público dispuesto a acompañarlos y letras que fomentan la libertad, el respeto y la diversidad.  Una gran noche para la banda que, como dijeron durante el show: “Es una fiesta y esta fiesta la hacemos todos juntos”.