Día 1: Fue menester

El sol y el tránsito en la previa al Aeródromo de Santa María de Punilla no eran los mejores amigos para los miles de asistentes que se dirigían en colectivos, autos y a pie. Pero al pasar los primeros centímetros por un portón que llega al predio, el mito de las sierras ya se empezaba a vivir. El paisaje es incomparable y entre fernets y fasos, el público disfrutaba de la vista mientras caminaba unas cuantas cuadras hasta encontrarse con un cartel que reza "Qué placer verte otra vez".  

Había de todo para ver, principalmente en los escenarios en donde la variedad es constante. Pero el espectáculo también estaba en un espacio para tatuajes (que fue protagonista por un arriesgado fan que le pidió casamiento a su novia), otro para cortarse el pelo con un look especial y otro en donde se juega un partido de fútbol bastante particular en unas bolas gigantes que los participantes se calzaban como un traje.  

Se puso heavy 

Los metaleros tuvieron su espacio en el escenario Spotify. Una de las bandas que sacudió el predio fue Malón, con temas como "Grito de Pilagá", "Cancha de lodo" y "Barbarie Colectiva". También marcó su paso Horcas y su gran frotman Walter Meza, que dejaron todo en canciones como "Sin salida", "Abre tus ojos" y "En la jaula".  

Carajo y A.N.I.M.A.L (por separado, no se emocionen) hicieron lo suyo con "Sacate la mierda", "Pura Vida" y "Chico Granada" por un lado; y  “Loco pro”, “Sólo por ser indios” y “Gritemos para no olvidar”, por el otro.

No todo se quedó allí porque en el escenario principal Almafuerte tomó las riendas y stones, metaleros, fiesteros y demás tribus hicieron propio el set de once temas que dejaron más que claro quién pisa más fuerte en la escena heavy nacional. “Convide rutero”, “Trillando la fina” y “La máquina de picar carne”, fueron algunos de los temas de Iorio y sus muchachos.

La banda de mi calle

Muchos de los grupos que tocaron en escenarios como el Alternativo, el Geiser o el Hangar, son conocidos en sus localidades y ya tienen un grupo de gente que los sigue a todos lados. El Cosquín es una vidriera para que el público de otras bandas pueda conocerlos y en una de esas puedan vivir la historia de las bandas que ya están consagradas.

Una de las destacadas, y que viene pisando muy fuerte, es Todo Aparenta Normal que se lució con un poderosísimo set en el escenario Alternativo que incluyó “Agazapado”, “Como un faro” y “Detener el tiempo”.

En este mismo espacio, Favio Posca sorprendió a todos con un fantástico unipersonal, lo que le dio un toque distintivo al festival, que continuó con la fiesta de la banda de percusión La Bomba de Tiempo. 

Por el Geiser, y durante los tres días, Catupecu Machu en formato electro acústico, presentó su Madera Microchip. Un espectáculo para algunos privilegiados que pudieron entrar a la carpa.

Salgan al sol, lagartos

El sol picaba, y cualquier cosa que hiciera sombra era válida para que los presentes se protegieran un poco. En el escenario principal Las Manos de Filippi le pegaron, como corresponde, al gobierno de turno y los clásicos se hicieron presentes: “Cutral-Có”, “Sr Cobranza” y “Los métodos piqueteros” aparecieron con toda la fuerza contestataria y característica de la banda.

Por su parte, Los Pericos hicieron muchos que sabían todos como “Nada que perder”, “Complicado y aturdido”, “Runaway”, “Sin cadenas” y  “Home Sweet Home”y The Wailers también hicieron de esas que si no las sabés, aunque sea en fonética, nunca escuchaste una radio. “Three little birds”, “One love” y “Jamming” pasaron por ese escenario con muy buena recepción por parte del público.

Salta la Banca fue la entrada antes del plato fuerte y también tiraron palos para el gobierno actual y para el anterior. Para “El relato” subieron Pecho y Cabra de las Manos, pero antes habían hecho temas como “Heidi”, “El jardín de mis agonías” y “Que nunca se repita”.

Como en Cosquín no duerme nadie y la fiesta es más que necesaria, Kapanga, junto a la bendición del Gauchito Gil, hizo todos esos temas que se quieren escuchar en un festival como “La taberna”, “Rock”, “El Universal” y “El Mono Relojero” que tuvieron de invitados a Fernando Ruíz Díaz y Walter Meza respectivamente.

Los elegidos

Para el cierre, la noche ya empezaba a mostrar las primeras gotas de lluvia, pero el público seguía firme. Aún faltaban La Beriso y Ciro y los Persas, los dos elegidos para abrir los shows de The Rolling Stones en Argentina.

La banda de Rolo Sartorio, que viene de llenar un Estadio Único, se lució con “Encarcelado”, “Flores”, “Ella” y  “Lo olvido”. El plato principal fue el del ex Los Piojos, que durante dos horas mantuvo a la gente encendida, entre temas de su etapa solista y los de su antigua banda. Algunos de los temas fueron: “Astros”, “Taxi boy”, “Insisto”, “Como Alí”, “Tan Solo”, “Ruleta”, “Desde lejos no se ve”, “Ruidos” y “Banda de garaje”. Una vez más, Ciro tuvo la gente a sus pies.

El día 1 del Cosquín Rock tuvo el agite justo y necesario. Pese al calor, una grilla bien medida permitió guardar algo de energía para las dos días siguientes.