Mente, cuerpo y soul

¿Qué pasó con esa chica que le escribió a Papá Noel para que le trajera el “Grandes Éxitos de Aretha Franklin” para Navidad, y que después revolucionó el mundo grabando versiones souleras con sólo 16 años? Simplemente siguió el camino musical que el destino le tenía marcado. Hoy, once años más tarde, más adulta y con más aplomo, se anima a encarar un tour visitando más de 200 países, sin haber perdido ni una pizca de su talento, su encanto o el ángel que posee.

La forma que Joss Stone tiene de encarar su tercera visita al país es realmente simple y descontracturada. Vestido negro fino y elegante, mesita con un termo, y con sus pies descalzos para lograr una mejor conexión. “You Had Me” seguida por el cover de Sugar Billy “Super Duper Love”, son una muestra de esto, ya que parecen que forman parte de una gran zapada, como si la diva estuviese en la sala de ensayo, volando sobre cada tema.

“Me gustaría poder hablar en español, pero no puedo, lo lamento” dice ella después de lanzar una risita nerviosa que todos compramos, para luego presentar un tema nuevo “Wake Up”, con un marcado ritmo reggae, que formará parte del disco que se viene, Water for Soul. Se ve que la participación en el megagrupo, SuperHeavy, con Mick Jagger y en especial con Damian Marley, dejó sus huellas.

La banda que trajo Joss en esta oportunidad merece un reconocimiento especial. Formada por batería, guitarra, bajo, teclados, vientos y coros, casi en su totalidad músicos negros, ¿Coincidencia? Obvio que no. Ahí es donde se gesta el groove criminal para que ella se luzca con su increíble voz, a través de varios estilos.

Charlatana y derrochando humor, Joss se anima a cantar a capella un fragmento de “Don’t Cry for me Argentina”, cerrando con un “Me sé hasta ahí”, provocando risas y aplausos. Más tarde terminaría el tema. Pero como las cuerdas vocales de J.S. no conocen de límites, puede navegar en distintos géneros con comodidad. Cantar baladas de R&B sobre corazones rotos –que tan bien le sientan – como “Could Have Been You” según ella, escrita para un idiota. También, enojarse en serio y detonar su voz como en “Molly Town” o “Karma” –"Karma’s your master, and you’re the bitch"- ¡Tomá!

La sensualidad, en este caso inocente, pero muy efectiva, también forma parte del show, logrando un punto altísimo con el cover de Screamin’ Jay Hawkin “I Put a Spell on You” y la versión súper funk de “Feel in Love with a Boy”, que pondría orgulloso a Jack White.El final, con todas las cualidades de Joss a flor de piel, fue con “Right to be Wrong” y “Some King of Wonderful” mientras regalaba flores al público. 

Estados Unidos, si continúan buscando armas de seducción masivas, síganle la pista a Joss Stone: ayer estuvo en el Luna Park, y lo llenó de magia…