Sí se puede

Las calles de Buenos Aires estaban frías el jueves por la noche: la lluvia mojaba a lo que se cruzara y el viento no perdonaba, pero el clima no influía en el Roxy, donde Santiago Palazzo musicalizaba la velada. El conductor estrella de La De Dios presentó a Nil Obstat y ellos arrancaron su show de manera potente y prolija. Los músicos mostraban una buena faceta musical, con canciones como "El hombre es peligroso", y “Guide Us”, cover del jamaiquino Don Carlos, que lo hicieron en español como en el disco, y para el que invitaron a los hermanos Frescolate para rapear en algunos tramos. 

La banda saludaba y rápidamente seguía el camino de la música con "Camino". El Roxy escuchaba atento, se cantaba y se bailaba cada tema. El amor invadió el salón con "Nunca te alejes", con un sonido extremadamente lover, que evidenció que en lo musical la banda está para jugar en primera, pero estos temas tan jugados con la voz y con los coros falta equilibrarlos, para que queden más agradables al oído.

"Muchas gracias a todos por venir, es un fecha muy especial para nosotros, hace cuatro meses cuando arrancamos con la gente de Los Cafres en la productora, esto se veía muy lejano y hoy que estén todos acá es importante porque les demostramos que sí se puede", dijo el cantante César García antes de "No quiero, no puedo".

Los vientos empezaban a tomar el protagonismo en canciones como "Hasta siempre" el homenaje al comandante Ernesto Che Guevara de Carlos Puebla y luego subió El Pety de Riddim para ponerle su voz a "Como hago". La banda volvía a mostrar lo que sabe hacer y desplegó un medley con estribillos de canciones del rey Bob, como "Jamming" y "Rebel music" entre otras, que fueron enganchadas con "Necesito", una canción del primer disco, y a la que le siguió "Creer" el corte difusión y título de la última placa de los de San justo.
 
César le puso su voz a "Seguir viviendo si tu amor", una bien lograda versión de un clásico del rock nacional creado por Spinetta. La banda y su público se divertían, el ambiente era cálido, pero el reloj y el el tiempo para tocar empezaban a ahorcar, sólo quedaban "Por fin" y con Diego Blanco en teclados "Iguanamari". Nil Obstat volvió al escenario para cerrar la noche con todo el potencial y con los temas más combativos y significativos como "Dejalo que", "Todo un palo", el clásico ricotero en versión reggae, y "Justicia", una canción con un estilo extremadamente Resistencia Suburbana, tan así, que en el disco fue grabada junto a Luis Alfa.

Nil Obstat se luce haciendo covers, algo que deja en claro que son grandes músicos que saben lo que hacen y que sienten la música. En los musical sólo falta ajustar algunos detalles en la voz, que no se distingue entre tanto talento y fuerza de los amplificados. La buena noticia es que apareció otra banda que puede ponerse de pie y andar en la escena local del reggae.