Preparen industrias que metal sobra

El frio y el transito caótico de Buenos Aires quedaban atrás al entrar en el ahora Teatro Vorterix de Colegiales, que estaba de fiesta porque esperaba por Fear Factory. Wachiturros abstenerse, estos no son los que tocan en las discotecas, este cuarteto californiano hace rock.

El teatro está renovado y algunos cambios se dejaban ver en las barras de tragos más cortas, algunos espejos y un sonido envolvente que lo diferenciaba del anterior. Volviendo al rock, 
el público esperaba tranquilo, algunos tomaban cerveza, otros sólo  hablaban. La monotonía del lugar pasó a tener una sola frecuencia al ritmo de la batería de Gene Hoglan, con los palos golpeando los platillos plateados para deleite de los metaleros, que explotaron cuando Fear Factory entró y todo empezó a rodar con "Mechanize",  Shock" y "Edge Crusher".

El metal industrial había llegado con todo. El delirio era pleno, los gritos demostraban que el aguante argentino es real, y que sin dudas somos el mejor público del mundo. El cantante Burton C. Bell agradecía en castellano y sin perder mucho tiempo seguían con "Smasher Devourer", "Acres of Skins" y "Linchpin". La banda arengaba, todo el mundo saltaba al palo, el sonido era arrollador y  el pogo era una batalla campal, todo esto mientras sonaban "Recharger", Power Shifter" y "Fear Campaing".

Los sonidos eran perfectos, entraba la guitarra, con el bajo y la batería se imponía desde el fondo. ¿Quieren más desmanes? preguntó Bell en voz y desató la locura con "Christploitation" y "Martyr".

Fear Factory había tocado casi una hora y parecía que el show daba para mucho más, teniendo en cuenta su extensa discografía, pero a la fiesta metalera sólo le quedaban cuatro canciones, que desatarían la locura de los presentes: "Demanufacture", "Self Bias Resitor", "Zero Signal" y el último fue "Replica"

 El Teatro volvió a vivir una fiesta de metal donde Fear Factory fue la estrella que brilló por casi 90 minutos. Esto sirvió para romper con esos recuerdos de aquella  primera vez que llegaron al país en el 2006 y donde habían decepcionado en su show de Obras. Ahora, seis años después se reivindicaron son su gente.