Y La Puerta Se Abrió...

Llevan once discos a cuestas, y se atrevieron a más, como para dejar en claro que nada está cerrado ellos arrojaron la “Llave de la puerta secreta” para abrir la historia una vez más, y demostrar que no sólo siguen vigentes, sino también que la esencia sigue intacta como los cuatro mil seguidores que el sábado pasado colmaron el estadio de Obras en la presentación del álbum.

El clima épico, tan característico de la banda, se lanzó con la “Intro” desde el inicio del recital con video y fragmentos de un libro sagrado emulando el best seller “Código Da Vinci” en el cual se inspira el espíritu del álbum. No había lugar a dudas, era Rata y su legado de magos, espadas y rosas cuando se escuchó la frase: “Escondida en un bosque, una puerta encontrarás... ella será la salvación”.

De ahí en más se sucedieron “La llave..” claro, “Haz tu jugada”, “El amo del camino”, “Sólo para mirarte”... y para regresar al motivo del encuentro con “Bajo el poder del sol” y “La otra cara de la moneda” dedicada por Barilari a “los que hoy no están y para que las cosas no se repitan” , en clara alusión a las víctimas de la tragedia de Cromañón.

La potencia del sonido que fue firme y sin altibajos estalló a la hora de los homenajes, el primero de ellos con “Mamma” luego con “Guitarra española” , allí sinceramente, Rata Blanca sabe marcar la diferencia del metal clásico que despliegan. Uno a uno lo integrantes de la banda fueron brindando su show individual cediendo la posta instrumental. Comenzó con la ausencia de Barilari que dejó todo en manos del bajista, que a su turno cedió el escenario al Walter Giardino en un sólo de guitarra hipnótico con aires de flamenco y puro hard rock. La frutilla del postre fueron los parches de Fernando Scarcella , ya sólo en las tablas, para culminar el tema y dar lugar a la mayor ovación de la noche.

Después de eso, sin dudas lo que vino bien fue un breve intervalo... digamos que para recuperar las respiración que ciertas emociones suelen ahogar. Podría decirse que el descanso no fue más que un pequeño recule para tomar envión, Rata volvió y arrasó con “El Gran Rey del Rock And roll”, y por fin...!! los cientos de globos atados en el techo finalmente fueron liberados para colorear la fiesta. De ahí en más se vinieron los clásicos como “Guerrero del Arco Iris” y “Mujer Amante” y todo fue un viaje en el tiempo.

Por un lado, no fue un show que apostó a sorprender desde ningún costado, el repertorio si se quiere fue predecible con temas de la placa y sus emblemáticos. Pero por otro, fue una noche que dejó satisfecho al público metalero que fue a buscar la llave de una puerta que ya tenía su éxito garantizado antes de sonar el primer acorde. Un sonido excelente y un despliegue de energía sobre el escenario se propagó por todos los rincones del estadio.