“MI NOMBRE ES BAHIANO Y HE VUELTO”

Por fin...! después de tanto recorrido mediático con innumerables actuaciones en TV, difusiones y presentaciones en varios programas de radio y de tanto anuncio y preparativo desde el lanzamiento, el Bahiano oficializó en la Trastienda BH+ su primer disco solista (por si quedó alguien sin enterarse) tras la separación de los Pericos.

Fueron dos funciones consecutivas, la primera claro está, parecía (por no decir fue) casi exclusiva para la prensa. La segunda había agotado las entradas. El Bahiano puso toda la carne al asador y se notó. Desde las 20, La Trastienda fue recibiendo al público con una puesta en escena digna de un debut. Y claro, todos iban a estar mirando, sobre todo por la artillería de camarógrafos y fotógrafos apostados en la planta alta de la sala. Pero no todo quedaba allí.

Para amenizar la espera, la previa contó con un despliegue de bebidas que no dejaría nadie con el paladar seco a la hora del arranque. Una serie de stands de conocidas marcas de cerveza, vino y whisky proveían de una degustación sin fin, en tanto, las bandejas con pizzas recorrían la sala tentado a más de uno.

A las 21 clavadas, se encendieron las lucecitas rojas de las cámaras, los fotógrafos alzaron su lentes, se corrió el telón y comenzó a sonar “Sales” en medio de un prolongado aplauso. De camisa negra y pantalón crema el cantante sentenció: “Mi nombre es Bahiano y he vuelto” , como para dejar en claro su regreso a los escenarios.

Luego siguió con “Planes” , el clima se fue calentando, y para cuando llegó “Oyelo” , el público, que no desbordaba la sala, se hizo notar con un grupo que coreó el hit a los saltos junto al escenario. Pero el ahora “solista” Bahino, no quiso estar tan solo en el regreso pues el guitarrista Miguel Botafogo y la cantante Luciana Palacio acompañaron al ex Pericos en los temas “Grandes días”, “Tu luz” y “Tanto Misterio” .

A lo largo de la presentación el Bahiano se mostró relajado y alegre, y si bien no hizo mención alguna sobre su regreso al ruedo, dejó entrever que hubo una intención al señalar que “antes de subir al escenario tenía muchas cosas para decir, pero viste cómo es” después no sale.

Ya entrando en el final del show, se guardó varios covers de Robert Nesta Marley como Kaya y Woman. Inevitable y casi una obligación moral fue también la interpretación de dos cortes de su paso por Pericos, “Complicado y aturdido” y “Casi nunca lo ves” .

Sin dudas, el bahiano salió de la penumbra para desafiar al pasado (que sigue latente y tocando), y apuesta a lo que vendrá desde el imperativo “Oyelo” hasta “No mires atrás” o “Todo puede ser”. Y eso no sólo se percibe en las letras de sus canciones donde hay mucho de autobiográfico, de autocrítica y esperanza, como el mismo lo dijo en su momento, sino que también quedó expresado en esta noche de regreso.