Rebotando el fin de año

En contra de los pronósticos, la banda no abrió con temas del nuevo disco, sino que hizo un picado de canciones en orden cronológico descendiente: “Hoy me desperté” de “Show” (2005), “Desaparecido” de “Maxisimple” (2002) y “Senderos” del disco “Máscaras de sal” (1994).

“Ustedes también son un sentimiento que se lleva adentro”, mimó el pelado Daffunchio al público en respuesta al cántico de la gente. Como perlita, se dieron el lujo de presentar un nuevo tema lento y melódico, que en la lista de temas figuró simplemente como “Que Suerte”.

Se podría decir que se viven momentos tensos en Las Pelotas; con la obsesivamente anunciada partida de uno de sus cantantes y frontman, Alejandro Sokol, y su posterior encabezamiento de un nuevo proyecto, denominado El Vuelto S. A.. Pero no sería justo sentenciar que, con la partida de Sokol, Las Pelotas se quedó renga.

La dinámica del grupo varió, pero no falló.: no se sintieron vacíos en la presentación. Era de suponer que, con la salida de uno de los pilares de la banda, la propuesta vaya mutando y parece ser que Daffunchio y compañía apuestan a bajar un poco el decibel del grupo y a inclinarse hacia el lado más tranquilo y romántico de la vasta obra pelotera. Esta vuelta les da cabida para desarrollar ese aspecto original de la banda de reinventar la canción de amor rock, como mostraron con “Será” y “Como se curan las heridas”.

El primero de los dos falsos finales hizo retornar a la banda al escenario con “Cuando podrás amar” y “Hawai”. Una petición recurrente por parte del público fue la de “No Tan Distintos (1989)” de Sumo. Como premio de consuelo, el cierre de la noche fue con un doblete de temas de autoría de Luca Prodan: primero, “Perdedores Hemosos” y de cierre, una muy ortodoxa versión del tema punk rock de Sumo, “El Ojo Blindado”.

Así despidieron Las Pelotas el 2008, con un repaso por toda su carrera y una noche íntima en San Telmo, mientras preparan lo que será su decimosegundo disco para marzo del 2009, el primero sin Sokol.