Caballos Salvajes

Finalmente, luego de casi 15 años girando en el under, y tras varios cambios de formación, Pegaso pudo materializar su propuesta. Lamentablemente, durante el show, la banda comandada por el cantante y guitarrista Gustavo Álvarez, tocó únicamente los diez temas de su álbum debut. Por la calidad demostrada sobre las tablas, quedó la asignatura pendiente de un concierto más extenso.

Las influencias del trío son claras: el ala blusera de Manal y la parte más pesada de Vox Dei y Pappo´s Blues. No en vano Álvarez supo formar parte de la Medinight band (el combo de Alejandro Medina) y su timbre de voz recuerda a Pappo, además de cierto parecido físico. El resto de los músicos acompaña sin fisuras, en una base que sabe amoldarse a los tiempos que pide la canción: Guillermo Trabucco en batería y Cristian Kieffer en bajo.

En su repertorio, la banda recorrió desde las pinceladas bluseras de “Noche gris” hasta la fuerza y distorsión de “Ya no se aguanta más”. Lo mejor de la noche fue “El tren”: un boogie al palo, con Walter Piancioli de Los Tipitos, un viejo amigo de la banda, castigando las teclas. El cierre fue con Catalina, rockazo y link directo a Vox Dei.

En un set demasiado corto, Pegaso despidió el año en el que finalmente pudieron editar su material. Una buena propuesta para los amantes del blues y el rock and roll clásico, algo que no es muy fácil de encontrar.